Ginebra - Estamos extremadamente preocupados por la escalada de la acción militar en Ucrania y el deterioro de la situación humanitaria.  
Reiteramos el llamamiento del Secretario General de las Naciones Unidas, António Guterres, al cese inmediato de las hostilidades y a la protección de la población civil y de las infraestructuras civiles.  

Ocho años de conflicto en Ucrania han provocado el desplazamiento de más de 1,4 millones de personas que ahora dependen de la ayuda para satisfacer sus necesidades diarias. Esta escalada no hará más que profundizar las necesidades humanitarias y agravar el sufrimiento de millones de familias.  

La OIM, junto con las Naciones Unidas y la comunidad humanitaria, se compromete a permanecer en Ucrania y a prestar asistencia vital a sus habitantes.  Asimismo, está dispuesta a responder a las necesidades humanitarias que surjan en el país y en la región, en estrecha coordinación con los gobiernos y asociados.  

Seguiremos operando de manera neutral e imparcial, dando prioridad al imperativo humanitario.