Más de 4.000 antiguos combatientes desmovilizados de grupos
armados ilegales y 290.000 víctimas de la violencia se
beneficiaron el año pasado del proceso de justicia y paz del
Gobierno colombiano, en el cual la OIM participa ayudando a que las
personas desmovilizadas retomen una vida civil y que las
víctimas de la violencia puedan acceder a la verdad, la
justicia y la reparación.

Bajo la Ley de 2005 de Justicia y Paz del Gobierno colombiano y
con la financiación de la Agencia de los Estados Unidos para
el Desarrollo Internacional (USAID), la OIM en Colombia ha
realizado unos 350 proyectos dentro de su Programa de apoyo a la
reintegración comunitaria, entre ellos: la apertura de nueve
oficinas regionales de la Comisión Nacional de
Reparación y Reconciliación, institución
colombiana que dirige el proceso de reparación para las
víctimas de la violencia; campañas de ayuda e
información para las víctimas y proyectos de
reparación de instalaciones colectivas en seis comunidades
afectadas por la violencia de grupos armados ilegales.

Asimismo, la OIM ha participado en el procesamiento de
más de 13.000 solicitudes de compensación
económica que el Gobierno colombiano ha puesto a
disposición de los familiares de las víctimas de la
violencia, ha asistido al Ministerio de Justicia en la
investigación de delitos denunciados por las víctimas
y ha ayudado en la búsqueda y entrega de los restos de
personas desaparecidas.  La asistencia técnica de la
OIM es de gran utilidad para colaborar en el fortalecimiento de la
coordinación entre las instituciones estatales colombianas
responsables de la ayuda a las víctimas.

Durante los últimos cinco años, 299.551 personas
se han inscrito como víctimas; se ha identificado a 4.352
criminales, que han sido enjuiciados, se han encontrado 2.719 fosas
comunes y los restos de 3.299 personas desaparecidas han sido
exhumados.

José Ángel Oropeza, jefe de la misión de la
OIM en Colombia, afirma: «Para nosotros ha sido muy
gratificante participar en un proyecto que ha tenido resultados
positivos tanto para el gobierno como para el pueblo colombiano y
que, sobre todo, ha servido para que las víctimas de la
violencia tengan mayores oportunidades de acceder a su derecho a la
verdad, la justicia y la reparación».

De acuerdo con el Alto Comisionado colombiano para la
Reintegración, el número de personas desmovilizadas
de grupos armados ilegales se eleva a 53.000; de ellos, 35.000 lo
hicieron como resultado de las negociaciones mantenidas por el
Gobierno colombiano y los grupos armados entre 2003 y 2006. 
El proceso de desmovilización, desarme y
reintegración incluye apoyo psicosocial, proyectos
generadores de ingresos y formación profesional para
garantizar que los ex combatientes no retomen las actividades
ilegales.

«El proceso de reintegración de ex combatientes y
de reparación de la violencia perpetrada por grupos armados
ilegales ha sido reconocido como uno de los procesos más
complejos de justicia transicional a nivel mundial y puede servir
de ejemplo a aquellos países que siguen viéndose
afectados por los conflictos», agrega Oropeza.

Para más información, póngase en contacto
con:

Jorge Gallo

OIM Bogotá

Tel. +57 1 622-7774

Email: "mailto:jgallo@iom.int">jgallo@iom.int