La gobernanza de la migración es una prioridad para Albania. Si bien se han realizado avances mediante la aplicación de la Estrategia y el Plan de Acción Nacionales sobre Migración para el periodo 2019-2022, aún quedan ámbitos susceptibles de mejora. Los esfuerzos por implicar a la diáspora y aprovechar su capital social y humano han arrojado buenos resultados hasta ahora. Por lo que respecta al programa de becas de la Unión Europea (UE), que a su vez forma parte del programa “Participación de la diáspora albanesa en el desarrollo social y económico de Albania”, este tuvo una incidencia muy positiva en la reestructuración del Marco Institucional de la Diáspora en 2022, donde se hizo hincapié en la necesidad de fortalecer las capacidades dentro del Ministerio de Europa y Asuntos Exteriores para llevar a cabo intervenciones de participación de la diáspora. El presente proyecto tiene por objeto fortalecer la gobernanza de la migración, el desarrollo socioeconómico y el cumplimiento de las normas internacionales, a través de la participación de la diáspora en el país. Los efectos del proyecto son dos: el primero consiste en prestar apoyo al Gobierno de Albania para que aproveche el nexo entre la migración y el desarrollo mediante la aplicación sostenible de estrategias y planes de participación de la diáspora, prestando particular atención a la Estrategia Nacional para la Diáspora (2021-2025). Se asignarán recursos adicionales al Ministerio de Europa y Asuntos Exteriores para fortalecer las capacidades institucionales, al facilitar su colaboración con los miembros de la diáspora potenciando sus competencias y conocimientos. Las necesidades específicas de las instituciones y el perfil deseado de los miembros cualificados de la diáspora se determinarán en coordinación con el Ministro de Estado y Negociador Jefe. El segundo efecto consiste en ayudar al Gobierno de Albania a adoptar una hoja de ruta para la gestión de la migración –en el marco del proceso de adhesión a la UE– que tenga en cuenta las cuestiones de género y se base en los derechos, en consonancia con las estrategias nacionales y las normas internacionales y de la UE. Esta hoja de ruta, que será el fruto de una labor conjunta, se ajustará a las recomendaciones de la UE en materia de gobernanza de la migración.