Comunicado
Global

Se brinda asistencia humanitaria a las comunidades vulnerables afectadas por las inundaciones en Níger

Las inundaciones en Níger han desplazado a más de 66.000 personas durante esta temporada de lluvias. Foto: OIM/Daniel Kisito Kouawo

Niamey – Cada verano Níger, nación ubicada al oeste de África, debe soportar lluvias torrenciales que pueden destruir cientos de hogares y disparar brotes de cólera, llevando con frecuencia a cuantiosas pérdidas humanas y materiales en todo el país.

De hecho este año más de 200.000 personas se encuentran en riesgo de ser desplazadas durante la estación de lluvias debido a que los ríos aumentan desmedidamente su cauce y se producen aludes. Cerca de 50.000 víctimas potenciales residen en Dosso, 45.000 en Niamey (la capital de Níger) y 38.000 más en  Maradi.

Tan sólo en estos dos últimos meses, las inundaciones mataron a 45 personas, hirieron a otras 45 en tanto que más de 66.000 quedaron desplazadas, sobre todo en las regiones de Maradi, Agadez y Zinder. Las autoridades le pidieron a los residentes de Niamey que tomen las precauciones que sean necesarias para prepararse para otros daños que puedan producirse si el Río Níger aumentara su cauce de forma desmedida e instaron a los residentes a que abandonen las zonas más proclives a las inundaciones.

La Organización Internacional para las Migraciones (OIM) y sus socios pueden asistir a las poblaciones afectadas por los desastres naturales que amenazan a Níger a través de su asistencia humanitaria de emergencia.

Junto a UNICEF y al Directorio General de Protección Civil de Niger (DGPC por su sigla en inglés), la OIM distribuyó esta semana más de 500 artículos no alimentarios (NFI), entre los cuales se pueden mencionar 250 lonas impermeables, a familias afectadas por las inundaciones en Dosso (285), Tillabéri (77) y Maradi (150).

Tras los pedidos del Ministerio de Acción Humanitaria y Gestión de Desastres (MAHGC por su sigla en inglés) de Níger, el Grupo de Trabajo en materia de NFI rápidamente se reunió y evaluó los niveles de riesgo, las necesidades y los costos, y respondió con rapidez y de forma adecuada.

“Eran cerca de las tres de la mañana cuando un vecino nos despertó, diciéndonos que debíamos levantarnos e irnos. La gente era arrasada por las inundaciones”, recordó Issaka Amadou, uno de los residentes del vecindario de  Kirkisoye en Niamey. “Eventualmente las autoridades lograron controlar las inundaciones pero tuvimos que mudarnos temporalmente a una escuela cercana”.

Junto con las casas, las copiosas lluvias han afectado también las cosechas y los trabajos hidráulicos a lo largo de las riberas del Río Níger en donde vive la mayor parte de los habitantes de ese país. Sin embargo, a pesar de las advertencias, muchos residentes se han negado a abandonar sus hogares.

La OIM ha estado muy activa en lo relacionado con brindar respuestas de emergencia en Níger desde 2013, proveyendo albergues y kits de NFI a comunidades vulnerables desplazadas. La OIM Níger también facilita, junto al MAHGC, la coordinación del Grupo de Trabajo en materia de albergues y de NFI.

“No se puede obligar a nadie a abandonar su casa o a vivir con el permanente temor de que sus viviendas sean destruidas”, dijo Bárbara Rijks, Jefa de Misión de la OIM en Níger. “Junto con las autoridades nacionales, estamos comprometidos con responder a esta crisis de la forma más eficiente posible y brindar alivio a las comunidades vulnerables que padecen necesidades”, agregó.

Para mayor información, por favor contactar a Mónica Chiriac en la OIM Níger, Tel: +227 8931 8764, Email: mchiriac@iom.int