Comunicado
Global

Programa de Micro Jardinería de la OIM y la FAO para ayudar a alimentar a los refugiados rohingyas y a las comunidades locales de Bangladesh

Cox’s Bazar – La OIM, en su calidad de Organismo de las Naciones Unidas para la Migración, y la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la Agricultura (FAO), están distribuyendo 50.000 kits de jardinería (cultivo de vegetales) para combatir la desnutrición y mejorar la dieta de las personas que se han visto afectadas por la crisis de los refugiados rohingyas en Cox’s Bazar, Bangladesh.

Casi 700.000 refugiados han huido a Cox’s Bazar desde Rakhine, estado ubicado al norte de Myanmar, en los últimos siete meses. Muchos ya estaban sufriendo desnutrición por pobreza y discriminación en Myanmar. Ahora, dependiendo de raciones de alimentos básicos tales como arroz, lentejas, aceite de cocina y especias que han sido distribuidas por agencias de asistencia cada dos semanas, los refugiados, en especial los niños de menos de cinco años necesitan con urgencia diversificar su dieta. Las familias locales también necesitan acceso a alimentos más variados y nutritivo

La iniciativa de micro jardinería, que proveerá semillas y herramientas a 50.000 familias – 25.000 en los campamentos de refugiados y 25.000 en los pueblos anfitriones en los sub-distritos de Ukhiya y Teknaf – forma parte de un programa por un monto de 3 millones de dólares para promover la jardinería hogareña y la producción a mayor escala entre los granjeros locales. La iniciativa es financiada por la Oficina de Población, Refugiados y Migración del Departamento de Estado de los EE.UU. (PRM por su sigla en inglés). Casi la mitad de los hogares que reciben esos kits son conducidos por jefas de familia.

“En los meses venideros podremos tener verduras de hojas y vegetales con regularidad,” dijo Hamida, de 27 años de edad, una joven madre que vive en el gran campamento de Kutupalong-Balukhali junto a su esposo y a dos niños, y que recientemente recibió un kit para micro jardinería. “En este momento solamente comemos vegetales cuando tenemos algo de dinero para comprarlos en el mercado. De lo contrario comemos solamente arroz y lentejas o a veces tan solo arroz con un poco de ají y de sal,” dijo Hamida.

“Los kits entregados implican que ellos (los refugiados) pueden cultivar sus propios vegetales y verduras de hoja en cualquier terreno que haya en las cercanías de sus albergues. Pueden también vender la producción adicional,” dijo Mohammad Abul Kalam, Comisionado de la Comisión de Repatriación y Alivio a Refugiados de Bangladesh (RRRC por su sigla en inglés) en Cox’s Bazar, quien procedió a la entrega de los primeros kits en el complejo del sub-distrito de Ukhiya. “Esto permitirá que la gente viva mejor” agregó.

Rashid Ahmed, de 48 años de edad, trabajador diurno local, está de acuerdo con esto: “Comprar las verduras de hoja y los vegetales regularmente en el mercado no es posible. Pero podemos contar con los mismos casi a diario si soy yo quien los cultiva”, dijo Rashid que es la única persona que genera un ingreso en su familia de siete integrantes. “También nos generará algún ingreso adicional. Puedo ganar por lo menos 100 takas (suma equivalente a 1.19 dólares) por semana vendiendo la producción extra,” agregó.

Como parte de los kits, las familias recibieron amaranto rojo, espinaca con alto contenido de hierro, quimbombós, frijoles para campo largo y semillas de zapallo. También recibieron abono, una pala, y una regadera. Los kits incluyen un cilindro hermético para almacenamiento de comida (capacidad de 60 litros), para prevenir con el mismo formación de moho y que de ese modo la comida termine infestándose, algo muy importante a medida que se acerca la estación húmeda. Las familias locales recibieron un kit ligeramente diferente, ya que la mayor parte de ellas poseen un área para jardinería de mayor dimensión que la de los refugiados. Todos los beneficiarios recibieron capacitación básica en lo relativo a técnicas de micro jardinería.

“La iniciativa se enfoca principalmente en la provisión de comida de alta calidad y muy nutritiva, a fin de mejorar la alimentación a nivel de los hogares, pero también se enfoca en la capacidad productiva y en las estrategias desde la granja hasta el mercado para los grupos de granjeros,” dijo Peter Agnew, Coordinador de la Respuesta de Emergencia de la FAO en Cox’s Bazar. “También estamos presentando nuevas tecnologías a las comunidades, ya que las mismas según se ha comprobado han tenido éxito en cuanto a producir vegetales muy nutritivos para la población de refugiados y en cuanto a proveer un cierto ingreso extra para las comunidades de acogida.” La FAO está implementando un proyecto de cinco años de duración junto al Departamento de Extensión Agrícola de Bangladesh (DAE por su sigla en inglés).

“Siete meses tras el inicio de la crisis, no son solamente los refugiados sino también la comunidad local la que necesita asistencia,” dijo Manuel Pereira, Coordinador de Emergencia de la OIM en Cox’s Bazar. “La velocidad del influjo de refugiados ha ejercido mucha presión sobre la agricultura local y sobre la cadena de provisión de alimentos. Hay 400.000 personas entre los refugiados y las comunidades de acogida que actualmente necesitan apoyo en materia de nutrición. Esta iniciativa mejorará su condición alimentaria. También contribuirá a mitigar el déficit de alimentos de 50.000 toneladas métricas anuales en Cox’s Bazar,” agregó.

Para mayor información por favor contactar a la OIM Cox’s Bazar:

Fiona MacGregor, Email: fmacgregor@iom.int, Tel. +880 173 333 5221

Shirin Akhter, Email: sakhter@iom.int, Tel: +880 341 52195