Ginebra – La Organización Internacional para las Migraciones (OIM) y el G5 Sahel firmaron ayer un acuerdo para el fortalecimiento de la cooperación regional y entre estados a lo largo del espectro de la movilidad humana como acelerador del desarrollo de resiliencia, desarrollo y gobernanza integrada de fronteras en los países del G5 Sahel.  

“Para la OIM la cooperación regional es esencial para, entre otras cosas, asegurar que la migración sea segura, ordenada y regular y responder efectivamente a los desafíos multisectoriales vinculados a la movilidad humana y el desplazamiento forzoso”, dijo el Director General de la OIM António Vitorino el miércoles en Ginebra tras la firma del acuerdo de cooperación con el Secretario Ejecutivo del G5 Sahel Embajador Eric Tiare.   

“Nuestra presencia en el terreno es un valioso bien para avanzar en la agenda de localización de acciones y respuestas en el marco del nexo para la acción humanitaria, el desarrollo y la consolidación de la paz. Y esto en cada país de la región tomado individualmente pero también en la región considerada como un todo”.  

Cubriendo una vasta área al sur del Desierto del Sahara, los aproximadamente 400 millones de personas que están viviendo en 10 países dentro de la región del Sahel enfrentan numerosos desafíos, entre ellos la falta de empleo y de infraestructura, conflictos y cambio climático, cada uno de los cuales impacta sobre las decisiones que las personas están tomando para migrar internamente o al exterior.  El G5 Sahel está compuesto por Mauritania, Mali, Níger, Burkina Faso y Chad.   

El nuevo acuerdo identifica tres prioridades estratégicas a ser implementadas por ambas organizaciones a través de programas conjuntos que brindarán soluciones sostenibles pragmáticas y relevantes:  

• Mitigación de los impactos negativos del desplazamiento forzoso y de la migración irregular por medio de la promoción de soluciones duraderas y de la reintegración sostenible de personas desplazadas y retornadas;   

• La migración es un acelerador del desarrollo, que incluye la creación de empleo para los y las jóvenes, en particular en relación a la movilidad laboral y el potencial para luchar contra la migración como estrategia de adaptación a las crisis socioeconómicas, conflictos y cambio climático; y    

• La gobernanza integrada de fronteras para la promoción de las fronteras como vector de paz, seguridad y desarrollo.  

La formalización de la relación entre la OIM y el G5 Sahel brinda la oportunidad de implementar enfoques conjuntos a medida para el abordaje de los complejos agentes impulsores de conflictos, inestabilidad, y desplazamiento forzoso en la región, dijo Vitorino.  

“La búsqueda de semejantes soluciones, sobre todo las basadas en el contexto, quedará en nuestros marcos colaborativos integrales como un trampolín hacia el mejoramiento de las condiciones de las poblaciones en el Sahel”, dijo.  

Los programas conjuntos a través del acuerdo entre la OIM y G5 Sahel serán implementados por medio de un -“’Enfoque Unidos en la Acción de Naciones Unidas” más amplio. También concurrió a la firma del acuerdo  Giovanie Biha, Representante Especial del Secretario General Interino de la Oficina de Naciones Unidas para África Occidental y el Sahel (UNOWAS), Mar Dieye, Coordinador Especial del Secretario-General para el Desarrollo del Sahel, y el Alto Representante de la UA Maman Sambo Sidikou.    

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Paul Dillon, Portavoz pdillon@iom.int  

Joëlle Furrer, Encargado Regional de Prensa de WCA jfurrer@iom.int