Con las preocupaciones por la seguridad como telón de fondo,
la OIM ha iniciado las operaciones de asistencia al retorno de
desplazados internos en Côte d'Ivoire occidental.

A lo largo de este mes, un grupo inicial compuesto por unas
45.000 personas recibirán ayuda para regresar a sus pueblos
y comunidades en las ciudades occidentales de Zouen Hounien,
Bin-Houyé y Blolequin. Este grupo forma parte de las cerca
de 150.000 personas desplazadas como consecuencia de la violencia
desatada en la parte occidental del país tras las recientes
elecciones, y fueron identificadas gracias a una misión de
evaluación conjunta llevada a cabo por la OIM, el ACNUR, la
OCAH y el sistema de las Naciones Unidas para la evaluación
y coordinación en caso de desastre.

El personal de la OIM sobre el terreno ha informado que, a pesar
de que las condiciones de seguridad han retornado a algunas zonas
de la parte occidental del país, son numerosos los
desplazados internos aún reacios a regresar a sus lugares de
origen por miedo a las represalias de los grupos armados.

«Son muchas las zonas a las que solo se puede acceder con
escolta armada, lo que plantea un grave desafío a los
trabajadores humanitarios», afirma Jacques Seurt, jefe de la
misión de la OIM en Côte d'Ivoire.

La OIM, junto con el ACNUR, el PMA, el UNICEF y otros organismos
locales e internacionales, facilitará el transporte y
exámenes médicos anteriores a la partida.

Asimismo, el personal de la Organización
acompañará a los retornados para garantizar que
éstos lleguen a salvo a sus destinos finales. Debido al
inminente comienzo de la temporada de lluvias, la OIM trabaja en la
identificación de rutas apropiadas para el tráfico de
los camiones ligeros a bordo de los que viajarán los
retornados.

El primer traslado ha sido organizado para finales de esta
semana y en él participarán unos 800 desplazados
internos de dos emplazamientos cercanos a Zouan-Hounien y
Bin-Houyé.

Sin embargo, la mayoría de los 27.000 desplazados
internos alojados en la misión católica de
Duékoué se niegan a retornar a sus pueblos, bien
porque temen por sus vidas, bien porque sus viviendas han sido
ocupadas por las personas responsables de su desplazamiento.

A pesar del aumento de la asistencia humanitaria, la
práctica totalidad de los desplazados en
Duékoué continúan viviendo en condiciones de
abarrotamiento extremo y muchas mujeres y menores lo hacen al
raso.

La OIM, en colaboración con las autoridades locales, ha
identificado terrenos y está en fase de establecimiento de
un nuevo campamento con el fin de aliviar la congestión de
la misión católica. También ha contratado a
más personal local para brindar una asistencia adicional a
los desplazados.

«Cada día quedan al descubierto más
necesidades, sobre todo a medida que la población va
abandonando poco a poco los bosques en los que se
escondía», explica Jacques Seurt de la OIM, quien
agrega: «Si bien los retornos continúan siendo pocos,
la mayoría de los desplazados seguirá necesitando
asistencia en semanas y meses venideros. La OIM apoyará
todos los esfuerzos de reconciliación esenciales para la
sostenibilidad de los retornos».

Entretanto, el personal de la OIM en Ghana habla de un descenso
la semana pasada del número de personas que huyen de
Côte d'Ivoire. En su momento de apogeo, entre el 12 y el 16
de abril, más de 130 migrantes cruzaron diariamente la
frontera con Ghana. Se trataba, en su mayoría, de
jóvenes originarios de las vecindades de Youpougon y Abobo,
las zonas de Abidján supuestamente a favor de Gbagbo.

En el centro de tránsito de Eagle Star, en la ciudad
fronteriza de Elubo, la OIM inscribió la semana pasada a 913
personas que abandonaron Côte d'Ivoire en busca de
protección. Estas instalaciones, diseñadas para
alojar a un máximo de 400 personas, albergan en la
actualidad a 700 migrantes, abarrotados en unas pocas estructuras
improvisadas, lo que ha desencadenado graves dificultades en
materia de agua y saneamiento.

A fecha de 26 de abril, más de 320.000 personas
habían cruzado a países vecinos huyendo de la
violencia desatada tras las elecciones. Entre ellas se incluyen
150.000 nacionales ivorienses llegados a Liberia.

La OIM ha hecho un llamamiento por valor de US$41,6 millones
para prestar ayuda urgente a miles de personas que huyen de la
violencia en Côte d'Ivoire y para evitar una
catástrofe humanitaria.

Hasta el momento, ha recibido US$1,8 millones de la Oficina de
Población, Refugiados y Migración (PRM) del
Departamento de Estado de los Estados Unidos, del Fondo central
para la acción en casos de emergencia y de la Agencia Sueca
de Cooperación Internacional para el Desarrollo (ASDI).

Para más información, póngase en contacto
con:

Jean Philippe Chauzy

IOM Geneva

Tel: + 41 22 717 9361

       + 41 79 285 4366

E-mail: "mailto:pchauzy@iom.int">pchauzy@iom.int