El 1 de octubre, la OIM llevó a cabo la primera
acción de reducción de ganado en la comunidad de
acogida de Kulan (Kenya septentrional).

Mil pastores (125 familias) de la zona se beneficiaron de esta
iniciativa que se inscribe en el programa de apoyo a los medios de
vida de la OIM y que está destinada a ayudar a la comunidad
de acogida de Kenya septentrional a superar los efectos de la
sequía.

Las comunidades de pastores han sido uno de los principales
afectados por la sequía. Además, deben enfrentarse a
la amenaza de perder sus medios de vida mientras intentan
encontrar, de manera cada vez más desesperada, pastos y agua
para un debilitado ganado que lucha por superar enfermedades y la
falta de provisiones.

En este ejercicio de reducción se compra a los pastores
el ganado más debilitado para que el resto pueda sobrevivir
con los alimentos disponibles. De este modo, las familias mantienen
aquellas reses que se encuentran en mejores condiciones para hacer
frente a la sequía, lo que les permite seguir
subsistiendo.

Una vez sacrificados, la carne de estos animales se reparte
entre las comunidades para su consumo. Asimismo, se les entrega
complementos alimenticios para el resto de los animales que han
sido previamente identificados como capaces para soportar la
sequía.

En esta línea y bajo la supervisión de los
oficiales pecuarios del distrito, se sacrificarán 500 ovejas
y cabras. Hasta ahora, han sido sacrificados 20 animales y su carne
se ha entregado a las familias vulnerables, acción que se
repetirá semanalmente para garantizar una fuente segura de
provisión de carne.

La OIM ha comprado tres reses por familias a un precio de KES
8.000, dinero que, siempre que las condiciones lo permitan,
podrá ser empleado para la adquisición de nuevos
animales o para satisfacer otras necesidades domésticas
inmediatas.

Se trata de un programa que tiene ventajas para ambos, comprador
y vendedor. Mientras que el segundo consigue dinero de la venta de
su ganado, el consumidor de carne no se ve obligado a vender
ningún animal. La carne servirá para alimentar a toda
la comunidad y, en especial, a los más vulnerables como son
las familias encabezadas por mujeres o menores, los ancianos, los
enfermos o los discapacitados.

Antes del lanzamiento del programa, la OIM puso en marcha un
Comité de gestión de ayuda encargado de sacrificar
las bestias y de garantizar tanto una distribución justa y
equitativa de la carne como el mantenimiento del resto de
animales.

Esta actividad de reducción se ha ejecutado de acuerdo
con las Directrices de emergencia para el sector ganadero (LEG) de
la FAO y bajo la supervisión de oficiales pecuarios del
distrito del Ministerio de Ganadería de Kenya.

El programa de apoyo comunitario a los medios de vida ha sido
financiado por el Fondo central para la acción en casos de
emergencia (CERF) de las Naciones Unidas y beneficiará a
unos 4.000 pastores vulnerables de la región. De ellos, un
60% son mujeres.

Dentro del mismo se cubrirán también actividades
como la rehabilitación de estructuras de retención
del agua y pozos a lo largo de las rutas migratorias del ganado, la
provisión y distribución de sets de salud y
suplementos alimenticios para el ganado y capacitaciones para
pastores de la comunidad sobre almacenamiento, conservación
y uso de pastos.

Para más información, póngase en contacto
con:

Judith Zsarbo

OIM Daadab, Kenya

Tel: +2 54 734 860 286

E-mail: "mailto:jszabo@iom.int">jszabo@iom.int