La Organización Internacional para las Migraciones (OIM),
con el financiamiento del Departamento de Ayuda Humanitaria de la
Comisión Europea (ECHO por sus siglas en inglés),
inició este fin de semana la entrega de kits de retorno a un
grupo de familias que resultaron afectadas por las inundaciones del
pasado 7 de noviembre de 2009.

La entrega de las donaciones es parte del proyecto en
ejecución, llamado "Apoyo a los Centros Colectivos y
Asistencia Humanitaria para las familias afectadas por los deslaves
en El Salvador".

Los kits de retorno, que permitirán a las familias
reinstalarse en sus viviendas,  incluyen cocinas con sistema
de gas, camas de madera, colchones, colchones, juego de comedor
plástico, vajillas y baterías de cocina, entre otros
enseres domésticos.

Jorge Sagastume, coordinador del proyecto de la OIM
señala que el gobierno local está encargado de
proveer la vivienda temporal, pero estas familias perdieron todos
sus enseres domésticos y es por ello que la OIM les hace
entrega de los kits de retorno.

"Perdimos todo, todo.  Mis hijos (de 10, 6 y 2 años)
y yo dormimos en una colchoneta en el piso y para cocinar, iba
donde unos vecinos", asegura la señora Elsy de Lourdes Mena,
una de las primeras beneficiadas con el kit de retorno.

Entre lágrimas, la señora Mena agradece la ayuda y
sonríe. "Mis niños andan en la escuela, ¡no se
imaginan la sorpresa que les espera! Hoy ya no duermen en el piso",
señala.

"¿No sabe lo que es cocinar en una cocina de lodo?
¡Viera que cansado!" asegura por su parte la señora
Ana María Salinas, quien cada día debía
preparar la comida para sus seis hijos en una improvisada estufa
hecha con ladrillos y una lámina de zinc forrada en barro
seco.

El dolor de espalda y los ojos rojos por el humo de esa cocina
de lodo se terminarán con la llegada de la cocina de gas que
forma parte del kit que recibió.

El proceso de selección de las familias beneficiadas fue
exhaustivo. "Las personas que se beneficiarían de este
proyecto debían tener varios requisitos: que fueran
damnificados de las inundaciones del 7 de noviembre, que en esa
ocasión perdieron todos sus bienes y que pudieran reubicarse
en zonas que no fueran de riesgo", señala Daisy Rivas,
técnico de campo de la OIM.

Rivas señaló que los primeros informes sobre las
familias damnificadas eran ofrecidos por las alcaldías, pero
los técnicos de campo debían dar el siguiente paso
verificando que los datos fueran correctos y que se tratara de
familias que no habían sido beneficiadas por otros
programas.

El proyecto se inició en noviembre anterior y tiene
previsto culminar su operación en mayo próximo y en
él serán beneficiadas 300 familias con sus
respectivos kits de retorno.  El mismo incluye también
la reparación algunos centros colectivos que albergaron a
los damnificados durante los primeros meses.

 

El 7 de noviembre de 2009 un sistema meteorológico de baja
presión provocó inundaciones y deslaves en la mayor
parte del territorio salvadoreño, dejando un saldo de 180
personas fallecidas y cientos de familias damnificadas.

Actualmente permanecen abiertos 30 centros colectivos que
continúan albergando a más de 1700 personas.