Comunicado
Global

La OIM velará por la calidad de la información pública en las operaciones de recuperación en Haiyan

Filipinas - La operación de ayuda humanitaria a gran escala que la OIM lleva a cabo tras el paso del tifón Haiyan irá respaldada por otra actividad de gran envergadura con objeto de velar por que la población afectada reciba una ayuda adecuada y efectiva.

En colaboración con el Departamento de Bienestar Social y Desarrollo del Gobierno de Filipinas y otros asociados, la OIM ha creado una red de comunicación con las comunidades que cuenta con periodistas locales, centros de llamadas y envío de mensajes y medios de comunicación sociales y tradicionales.  El proyecto se dirige a 500.000 personas que se encuentran en centros para desplazados y comunidades de acogida, y hace especial hincapié en las mujeres y los niños.

Se precisa una respuesta innovadora ya que, como demuestran los datos de la OIM, más del 70 % de la población afectada permanece sin red de telefonía móvil, debido a una serie de factores como los daños sufridos por las infraestructuras, la pobreza y la falta de electricidad.  La prensa escrita y la televisión se han visto muy afectadas y la radio funciona solo al 50 % de su capacidad.

“Uno de los retos más arduos después de un desastre es la frustración que se palpa en las comunidades afectadas.  Si no entienden las decisiones que se toman en su nombre, y no se siente parte de ellas, irrumpen los rumores y las tergiversaciones que, en el peor de los casos, desembocan en violencia”, explica Leonard Doyle, jefe de comunicaciones electrónicas de la OIM.

La OIM prevé ampliar la línea de acceso directo del Departamento de Bienestar Social y Desarrollo para que cuente con un centro de llamadas que ofrezca la posibilidad de comunicarse con las poblaciones afectadas por voz y con mensajes de texto.  Así, se garantizará una respuesta inmediata, 24 horas al día, todos los días de la semana, en situaciones en las que haya vidas que corran peligro y otros casos urgentes.

Por una serie de motivos, las mujeres y los niños son especialmente vulnerables cuando se dan desplazamientos masivos o se pierden viviendas, por lo que la mejora de los mecanismos de comunicación se ha concebido también para mitigar la violencia sexual y basada en el género.

Servirá también de plataforma de información sobre la trata de personas, peligro muy real tras el paso de Haiyan.  La OIM, conjuntamente con el Departamento de Bienestar Social y Desarrollo y el ACNUR, estima que más de 5.000 personas han abandonado las zonas damnificadas con destino a los grandes centros urbanos, donde son víctimas fáciles de abusos sexuales y de otro tipo.

La OIM y el Departamento de Bienestar Social y Desarrollo son los organismos que lideran la gestión y coordinación de los campamentos, es decir, se ocupan del buen funcionamiento de las zonas que acogen a un gran número de personas.  “Los periodistas que tenemos en las comunidades velarán por que toda población afectada, esté en refugios o con familias, y la comunidad de acogida reciban la información de mejor calidad, de manera oportuna y de forma que se respeten los contextos culturales locales”, señala Doyle.

Este proyecto se pondrá en marcha en Aklan, Antique, Capiz, Iloilo, Negros Occidental, Cebu, Samar Oriental, Leyte y Samar Occidental.

Para más información, póngase en contacto con

Romina Santa Clara
Correo electrónico: rstaclara@iom.int
Tel.: +63919 8072798