Comunicado
Global

La OIM solicita más refugios para tormentas en la región de Asia y el Pacífico

Tailandia - Cuando el tifón Hagupit arrasó la costa este de Filipinas la semana pasada, la cifra de víctimas mortales fue de solo decenas de personas, en comparación con los miles de personas que perdieron la vida a consecuencia del tifón Haiyan el año pasado.

En parte la cifra reducida se debió a que el tifón Hagupit fue más débil que el Haiyan, pero sobre todo a un esfuerzo de evacuación masiva que las autoridades de Filipinas emprendieron con ayuda de la OIM y otros socios humanitarios.

Expertos en meteorología y el Banco Asiático de Desarrollo advierten sobre la posibilidad de tormentas más fuertes en la región de Asia y el Pacífico que afectarán zonas urbanas de rápido crecimiento.  Por lo anterior, la OIM insta a una mayor inversión en edificios de usos múltiples con capacidad para un gran número de personas evacuadas en caso de mal tiempo.

“Muchos edificios municipales, iglesias, bodegas y otras grandes estructuras se utilizaron como refugios durante los tifones Haiyan y Hagupit”, señaló Brian Kelly, Asesor de Emergencias y Post-Conflicto de la OIM para Asia y el Pacífico.  “El problema es que a menudo no se diseñaron para ese propósito, por lo que no se sabe con certeza si son aptos para este fin”.

La OIM considera a Bangladesh como un modelo, donde los refugios especiales para tifones han estado en uso desde la década de 1970, tras el catastrófico ciclón Bhola de 1970, que causó la muerte de hasta medio millón de personas.

El país cuenta con una red de casi 2.000 refugios que se pueden utilizar como escuelas y centros comunitarios.  Si bien su construcción y mantenimiento es costoso, la existencia y utilidad de usos múltiples de estos edificios –junto a los programas de vivienda flexible– permite que las personas reanuden rápidamente su vida después de tormentas severas, lo que tiene sentido a nivel económico y humanitario.

“Estamos analizando de cerca el caso de Filipinas como modelo para el despliegue de sistemas de preparación avanzada en toda la región”, subrayó Kelly.  “Definitivamente, existe la voluntad de intensificación de la preparación, tanto en Filipinas como en otros países propensos a tormentas.  Esto tendría que ser parte de un paquete integral que se base en la excelente labor realizada por el Gobierno de Filipinas”.

En Bangladesh, las agencias de ayuda humanitaria y las autoridades han agregado medidas tales como letrinas en terrenos más altos, depósitos de agua dulce y rutas de escape rápido, para optimizar la eficacia de los refugios.  Además, la OIM está analizando la manera de reducir el número de muertes por inundaciones, tsunamis y marejadas ciclónicas, y prevenir el desplazamiento a gran escala que acompaña los desastres.

Análisis: Casi un tercio de los ciclones tropicales del mundo se forman en el Pacífico occidental.  Además de la alta frecuencia de tormentas, en esta cuenca también se registran las tormentas más intensas de todo el mundo, tales como el Haiyan de noviembre 2013, la mayor tormenta que jamás haya tocado tierra.  Los ciclones tropicales se forman en cualquier mes del año a través del noroeste del Océano Pacífico y se concentran alrededor de junio y noviembre en el norte del Océano Índico.  El área del noreste de Filipinas es el lugar más activo del mundo para ciclones tropicales.  En 2008 el ciclón Nargis azotó el sur de Myanmar, con efectos catastróficos.  Viet Nam, China, Indonesia, India y Camboya han sido afectados por grandes tormentas en los últimos años.

Para obtener más información, por favor ponerse en contacto con

Brian Kelly

en la Oficina Regional de la OIM para Asia y el Pacífico en Bangkok

Email: bkelly@iom.int