Niamey – Abarcando los cruces migratorios de África Central y Occidental, Níger es uno de los países menos desarrollados del mundo y como tal es muy vulnerable a impactos climáticos y a la inestabilidad regional.

Como país de tránsito para la migración, Níger debe enfrentar constante actividad migratoria en sus fronteras con Libia y Argelia. En agosto solamente se registraron unas 48.000 personas en los siete Puntos de Monitoreo de Flujos con los que la OIM cuenta en Níger las cuales estaban transitando por dicho país.

Adicionalmente, el agua es muy escasa y un bien muy preciado en Níger sobre todo por el extremo clima desértico. Su ausencia puede originar epidemias de enfermedades originadas en el agua como por ejemplo el cólera, la fiebre tifoidea y la disentería.

A fin de poder fortalecer las capacidades en materia de salud de Níger, especialmente en la zona de frontera, la Organización Internacional para las Migraciones (OIM) lanzó hace un año su proyecto del área de Inmigración y Gestión Fronteriza (IBM) llamado Fortalecimiento de las Capacidades en materia de Salud en Fronteras en Assamaka  y Séguédine.

Assamaka, una ciudad de la región de Agadez ubicada al norte de Níger, con regularidad es testigo de la llegada de migrantes a través de las fronteras de Argelia. Para mejorar las instalaciones sanitarias en Assamaka, el equipo de IBM de la OIM en Níger construyó varias infraestructuras de Agua, Sanidad e Higiene (WASH por su sigla en inglés) tales como un tanque de agua, letrinas y lavabos. Un pozo conectado a las nuevas instalaciones fue construido para suministrarle agua potable a la ciudad, en tanto que al nuevo centro de salud de Assamaka se le entregó equipamiento médico.

El esfuerzo es apoyado por el Gobierno de Suecia y tiene como objetivo reforzar la sanidad y los cuidados de la salud en las Fronteras de Níger con Libia y con Argelia. El proyecto concluyó este mes.

Durante el proyecto numerosas actividades se implementaron tanto en Assamaka en la frontera con Argelia como en Séguédine en la frontera con Libia, en estrecha cooperación con las autoridades nacionales y regionales relevantes, para beneficio de las autoridades sanitarias, las comunidades fronterizas y los migrantes.

Séguédine, situada en la región de Kawar, es considerada uno de los principales puntos de tránsito para los migrantes que van hacia o regresan de Libia. A fin de poder hacer frente al clima extremo de Kawar, la OIM ha instalado paneles solares para poder brindar energía al centro sanitario recientemente construido por medio de electricidad renovable.

Rescatado de la gran preocupación de los cortes diarios de electricidad, el centro de salud ahora podrá almacenar adecuadamente sus medicamentos y vacunas, con la temperatura correspondiente. Como parte de las actividades del proyecto, una torre para agua también fue construida y la misma servirá para cubrir las actuales necesidades en materia de agua de la ciudad. Por otro lado se ha comprado equipamiento médico básico y medicinas para el centro de salud.

“Cuando estamos enfermos, es difícil saber a quién puedes recurrir puesto que no contamos con la infraestructura básica”, dijo Amadou, una de las 1.500 personas que residen en Assamaka. “La falta de letrinas adecuadas y de agua potable en medio de este calor extremo pueden ser contraproducentes para la salud. Ahora esperamos que la infraestructura que se ha construido recientemente pueda mejorar la salud colectiva de nuestra ciudad”.

Dado que el hospital más cercano en Assamaka se encuentra a tres horas por un camino arenoso, la ambulancia que se adquirió recientemente asegurará ahora que las personas con necesidades puedan recibir asistencia médica urgente. En el marco del mismo proyecto, una capacitación para los dos choferes de ambulancia en Assamaka y Séguédine fue dictada por la Dirección de Salud Pública en Agadez.

Adicionalmente, el proyecto fortaleció las capacidades de 20 agentes encargados de aplicar la ley en Nigeria que trabajan en las fronteras de ese país, y quienes concurrieron a una capacitación de tres días sobre respuesta humanitaria en zona de fronteras, la cual les permitió adquirir los conocimientos y las habilidades básicas acerca de cómo brindar asistencia médica durante una crisis fronteriza.

“Estas infraestructuras que han sido construidas recientemente representan un agregado muy necesario tanto para los migrantes como para los miembros de la comunidad”, sostuvo Barbara Rijks, Jefa de Misión de la OIM en Níger. “Al ver cómo muchas de estas personas con frecuencia están varadas en el desierto en medio de temperaturas extremas, esperamos que estas mejoras faciliten su recuperación y que incluso a veces, puedan llegar a salvar vidas”.

Para mayor información por favor contactar a Monica Chiriac en la OIM Níger, Tel: +227 8931 8764, Email: mchiriac@iom.int