El proyecto de comunicaciones humanitarias de la OIM, valorado en
US$ 465 millones y concebido para apoyar la ejecución de un
programa de indemnización a 1,1 millón
víctimas de las catastróficas inundaciones de 2010 en
Pakistán, llega a su fin.

Este sistema de ayuda en efectivo, dirigida por el Gobierno,
recibe también el nombre de Tarjetas Watan o Programa de
Compensación de los Ciudadanos por Daños.  Desde
su comienzo, en marzo de 2010, ha sido el sistema de
indemnizaciones de mayor envergadura nunca antes puesto en marcha
en el país.

En el marco del mismo, que ha contado con el respaldo del
Departamento para el Desarrollo Internacional del Reino Unido
(DFID, por sus siglas en inglés) y del Banco Mundial, se ha
entregado a cada familia afectada US$422, cantidad abonada en dos
tramos iguales de US$ 211.

La OIM se ha ocupado de establecer y mantener un sistema de
comunicación recíproca entre el Gobierno, los
beneficiarios y otros interesados.  Además, junto con
la Dirección Nacional de Bases de Datos y Registros (NADRA,
por sus siglas en inglés), ha proporcionado
información esencial a los beneficiarios, en especial sobre
las indemnizaciones en metálico y los criterios de
selección.

La concepción de los mensajes ha corrido a cargo de los
expertos técnicos y se ha recurrido a las sesiones de
concienciación comunitaria y a los medios para su
difusión. El personal del proyecto de comunicaciones
humanitarias de la OIM ha trabajado también en los Centros
de facilitación de tarjetas Watan.  A ello se suma, el
establecimiento de un centro telefónico, abierto las 24
horas, con un número gratuito de información en
diferentes idiomas, en el que los beneficiarios pueden
además tramitar sus denuncias y remitir casos.

“Nos dirigimos a diferentes personas para resolver nuestro
caso, pero fue el equipo de comunicaciones el que nos ayudó
a realizar las gestiones, lo que nos ha permitido recibir la
indemnización”, explica Khaisata Rehman jornalero en
el distrito de Charsadda y víctima de las inundaciones.

A medida que el programa alcanza su fin, el centro
telefónico será transferido a la NADRA, que se
ocupará de difundir información sobre una serie de
programas de protección social, particularmente sobre
aquellos relacionados con los medios de vida y la reducción
de la pobreza.

“Para las familias que tanto perdieron en las inundaciones
de 2010 ha resultado fundamental saber qué tipo de ayuda
podrían recibir.  Les ha servido para planificarse,
evitar ser víctimas de abusos y tener más
oportunidades de rehacer sus vidas.  A través de su
apoyo al Gobierno de Pakistán, la OIM ha desempeñado
un papel primordial en la información a familias vulnerables
del tipo de ayuda a la que podían acceder y cómo
beneficiarse de la Tarjeta Watan.  Esto ha puesto de
manifiesto la importancia de que las comunidades afectadas por una
crisis humanitaria tengan acceso a informaciones
pertinentes”, asevera Alexis Ferrand, economista principal
del DFID.

Para más información, póngase en contacto
con

Maria Ahmad

OIM Pakistán

E-mail: "mailto:m_ahmad@iom.int">m_ahmad@iom.int