La OIM ha lanzado su primer proyecto piloto de gran envergadura de
construcción de refugios temporales en las inmediaciones de
Puerto Príncipe.

El proyecto prevé llevar a cabo la construcción de
aproximadamente 80 refugios de contrachapado, chapa ondulada y
cimientos de cemento, los cuales servirán de vivienda a la
comunidad de Mangeoire, una zona desfavorecida del distrito de
Pacot, en la capital, y que fue devastada tras el seísmo del
pasado 12 de enero.

La operación – diseñada tras extensas
negociaciones con las autoridades locales y líderes
cívicos – es un ejemplo eficaz de cómo
movilizar a las comunidades locales para que participen en las
actividades de retirada de escombros y de reconstrucción de
sus barrios.

Las estructuras, diseñadas por arquitectos e ingenieros
de la OIM, perdurarán entre 3 y 5 años y
resistirán a las tormentas y vientos de la temporada
haitiana de lluvias.

Este proyecto piloto marca el inicio de una nueva etapa en la
provisión de refugio sostenible para unos dos millones de
haitianos desplazados.  Dichos refugios temporales
proporcionan una solución más duradera que las
tiendas de campaña y lonas impermeables distribuidas
anteriormente, en la fase de emergencia temprana.

Asimismo, constituye una atractiva alternativa a la
reubicación para aquellas familias cuyos hogares y
vecindades fueron destruidos.

En lugar de trasladarse a nuevos emplazamientos en Puerto
Príncipe o sus alrededores, los vecinos de Mangeoire
tendrán la posibilidad de permanecer unidos, próximos
a sus lugares de trabajo y educación.

Además, gracias al programa de dinero por trabajo
gestionado por la ONG ACTED, los miembros de la comunidad realizan
actividades de retirada de escombros y de limpieza de
emplazamientos adecuados para la construcción de nuevos
refugios.

«Hace apenas un mes no había espacio libre para la
construcción de viviendas debido a los escombros
acumulados», explica Alex Coissac, coordinador para las
actividades de refugio de la OIM, quien añade: «Ahora
la mejora es evidente.  La construcción de refugios ha
motivado a las comunidades locales a aumentar el ritmo de la
retirada de escombros».

El posible problema de la tenencia de tierras se ha evitado
mediante un acuerdo escrito entre los beneficiarios y la comunidad
local.  La doctora Yolene Surena, de la Dirección
General de Protección Civil de Haití visitó
los primeros refugios este fin de semana y enviará
ingenieros de Protección Civil la semana próxima para
llevar a cabo una serie de evaluaciones de seguimiento
técnico. 

De los 10 refugios de Mangeoire donde se han iniciado las
labores de construcción, cinco están a punto de
finalizar.  Los líderes comunitarios estiman que, a
largo plazo, se construirán un máximo de 80 nuevos
refugios. 

No obstante, se trata de una ardua tarea debido a las
difíciles condiciones medio ambientales en la que se
encontraba este barrio desfavorecido.

Asimismo y en estrecha colaboración entre la comunidad y
la alcaldía, han comenzado los trabajos en
Croix-des-Bouquets, en la zona de Petit Bois, donde se espera que
la actividad progrese con mayor rapidez puesto que la
distribución de dicha vecindad es menos
problemática.  Hasta el momento, se han construido 40
refugios y se espera que este ritmo gane velocidad.

Elizaire Emmanuel, coordinador conjunto de la comunidad local,
expresó el agrado de los residentes de Mangeoire al tener la
oportunidad de regresar a sus terrenos.

«A pesar de que algunos se quejan del reducido
tamaño de los refugios, en comparación con lo que
tenían antes, están contentos de poder regresar a sus
lugares de origen», explica.

Coissac de la OIM enfatizó la importancia de que la
construcción de nuevos refugios haya sido un proyecto
dirigido por la comunidad.  Tras observar la complicada
ordenación de montañas y valles en Mangeoire,
señala: «Cada sitio es peculiar».

«Para hacerlo bien se requieren varios meses de trabajo,
sobre todo por la necesidad de introducir el concepto de
planificación urbana en la comunidad para así
organizar mejor el espacio disponible».

Duverger Anallia, residente de la zona desde hace más de
20 años y que ha perdido su hogar, explica que un
propietario de tierras de la localidad les ha permitido durante un
tiempo instalarse en un terreno cercano pero que ahora es el
momento de marcharse. «No es muy grande pero ya es hora de
regresar», afirmó. «Es mejor que vivir en una
tienda de campaña».

Anallia explicó a continuación los planes de
mejora de su vivienda para las semanas venideras y afirmó
que seguiría a cargo de su negocio una vez en el
refugio.  «Poco a poco, vamos haciendo las cosas»,
añadió.

La OIM ha recibido financiamiento del  Fondo de donantes
múltiples de Ayuda de Emergencia en Haití, del
Gobierno de Japón y del Gobierno de Suecia para la
construcción de 7.300 refugios, cifra que podría
aumentar hasta alcanzar los 12.000.

Para más información, póngase en contacto
con:

Mark Turner

OIM Haití

Tel. +509 37025066/ +509 34906678

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