Comunicado
Global

15 millones de personas enfrentan crisis humanitarias por la sequía en el Cuerno de África

En Somalia, se ha coordinado el transporte de agua en camiones, la distribución de kits de higiene, y la construcción y rehabilitación de pozos de perforación y manantiales superficiales para poder apoyar a las poblaciones afectadas por la sequía en 103 lugares en las regiones de Gedo, Galmudug, Lower Shabelle, y Lower Juba. Foto: OIM Somalia 2022/Ismail Osman

Los camellos son una verdadera cuerda salvavidas para muchas familias nómades que dependen casi totalmente de su leche y de su carne para poder soportar los períodos de grandes sequías. « Estos camellos son mi esperanza en esta vida », señala Abdi mientras los animales beben de un pozo de perforación rehabilitado por la OIM en Somalia. Abdi le agrega crema de avena al agua para que los camellos también puedan incorporar los nutrientes que necesitan. Foto: OIM Somalia 2022/Ismail Osman

Mientras la sequía empeora, la OIM gestiona más fondos para aumentar su asistencia vital. Es necesario actuar de inmediato para prevenir un desastre humanitario en los próximos meses. Foto: OIM  Somalia 2022/Ismail Osman

Nairobi – El Cuerno de África está atrapado en medio de la peor sequía en décadas – secando los paisajes, aumentando la inseguridad alimentaria y provocando desplazamiento masivo. Es crucial contar con una respuesta humanitaria inmediata y eficaz para evitar el deterioro a gran escala que se espera en toda la región para mediados de este año.

Se estima que unos 15 millones de personas ya se encuentran severamente afectadas por la sequía en Kenya, Somalia, y Etiopía – aproximadamente 3,5 y 7 millones de personas en cada país, respectivamente.

El impacto sin precedentes de varias temporadas fallidas de lluvia amenaza con generar una crisis humanitaria en la región que en el pasado ya ha sufrido  sucesivas calamidades como los conflictos y la inseguridad, los fenómenos climáticos extremos, las langostas del desierto y los impactos socioeconómicos negativos de la pandemia de COVID-19.

Si bien el Cuerno de África ha experimentado crisis inducidas por el clima durante décadas, el impacto de la actual sequía en tierras áridas y semi-áridas (ASAL por su sigla en inglés) en la región, ha sido especialmente severo. Hay un alto riesgo de hambruna y malnutrición mientras la situación en materia de seguridad alimentaria se deteriora rápidamente.

Los campos de pasturas y los puntos de provisión de agua se están secando en toda la región. Las comunidades rurales y de pastores cuya subsistencia depende de los recursos naturales son testigos de la muerte de sus cabezas de ganado y de la pérdida de sus medios de subsistencia. Miles de acres de cosechas han resultado destruidos y solamente en Kenya, 1,4 millones de cabezas de ganado ha muerto por la sequía en el último tramo del año pasado.

Cientos de miles de familias se han visto obligadas a abandonar sus hogares a la búsqueda de alimentos, agua y pasturas, aumentando la presión sobre los recursos naturales de por sí limitados. La sequía ha aumentado también el riesgo de que acontezcan conflictos entre las comunidades, puesto que las comunidades de pastores y las que se dedican a trabajar la tierra compiten por el agua disponible que cada vez es más escasa.

En Somalia, que padece la peor escasez de agua en 40 años en algunas zonas del país, el Gobierno declaró el estado de emergencia en noviembre de 2021. De acuerdo con el último estudio de la Matriz de Seguimiento de Desplazamiento (DTM) de la Organización Internacional para las Migraciones (OIM), es inminente el desplazamiento de más de  1 millón de personas en Somalia por la sequía, las cuales irían a agregarse a los 2,9 millones que ya se encuentran desplazadas.

Partiendo de la base de anteriores patrones de desplazamiento por sequía en Somalia, las poblaciones afectadas posiblemente se muden desde zonas rurales a centros urbanos. El desplazamiento adicional hacia ciudades mayores abrumará servicios esenciales como los de cuidados de la salud, aumentando el riesgo de las infecciones, y llevando a brotes de enfermedades (como por ejemplo la diarrea acuosa aguda o el cólera) además de otras problemáticas originadas en la ausencia de servicios sanitarios.

La OIM ha estado monitoreando los flujos de personas y ha podido detectar un  aumento de los movimientos inducidos por la sequía desde Somalia hacia Etiopía, posiblemente para poder acceder a pasturas y agua. Lo paradójico es que Etiopía también sufre las severas consecuencias de la sequía. En las zonas sur y sureste, el fenómeno ha afectado los medios de subsistencia de al menos 4 millones de comunidades de pastores que crían ganado y de pastores dedicados a labrar la tierra.

La OIM está trabajando muy estrechamente con los gobiernos, los organismos de las Naciones Unidas y asociados en cada país a fin de abordar las graves necesidades en materia de agua de las personas internamente desplazadas (IDP), migrantes y grupos vulnerables, para evitar un desastre humanitario. A través de su presencia operacional, de las capacidades logísticas existentes, de las alianzas locales en Kenya, Somalia y Etiopía, y del mecanismo del Fondo de Respuesta Rápida en Etiopía, la OIM está muy bien posicionada para poder responder a las poblaciones afectadas por la sequía en toda la región.

Sin embargo, a pesar de que la OIM responde activamente, las necesidades superan la capacidad disponible y los recursos son limitados. Se requiere con urgencia contar con más recursos para poder salvar vidas y ofrecer medios de subsistencia, mitigar desplazamientos adicionales y evitar el aumento de las necesidades en el futuro.

Entre las necesidades inmediatas puede mencionarse la asistencia humanitaria de emergencia a gran escala, incluyendo alimentos, agua, saneamiento e higiene para todos (servicios WASH), salud, artículos no alimentarios (NFI), e intervenciones para la gestión de los medios de subsistencia y de los conflictos.

A largo plazo, la crisis climática mundial ha dejado en evidencia la necesidad de aumentar el nivel de preparación colectiva para desastres y para la adaptación al cambio climático. Tal preparación debe incluir el abordaje de necesidades estructurales de desarrollo de las poblaciones vulnerables y priorizar el acceso inclusivo a los recursos naturales.

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Para más información por favor contactar con:

Oficina Regional de la OIM para África Oriental y el Cuerno de África: Amber Christino, Oficial de Prensa, Email: achristino@iom.int

OIM Etiopía: Sharif Faisal, Coordinador Sénior de Apoyo a Programas, Email: sfaisal@iom.int

OIM Kenya: Kaho Yamaguchi, Oficial de Programas de Estabilización y Emergencias,  Email: kyamaguchi@iom.int

OIM Somalia: Mohamed Abdelazim, Coordinador de Emergencias, Email: mabdelazim@iom.int