Más de 60 años
después de la liberación del Campo de
Concentración de Auschwitz, las indemnizaciones y asistencia
humanitaria siguen promoviendo la reconciliación tras la
guerra

Hoy, cuando el mundo celebra el Día
Internacional de la Conmemoración de las Víctimas del
Holocausto, más de 125.000 sobrevivientes del Holocausto y
otras victimas de los Nazis han recibido indemnizaciones a
través de dos programas de la OIM.

El Programa Alemán de
Indemnización por Trabajos Forzados (GFLCP), está
financiado conjuntamente por el Gobierno y la industria de
Alemania, y el Programa de Bienes de las Víctimas del
Holocausto/ Bancos Suizos (HVAP) está financiado a
través del fondo del Litigio de los Bancos Suizos por la
suma de 1.250 millones de dólares EE.UU., y administrado por
el Tribunal Federal de los Estados Unidos del Distrito Este de
Nueva York. Los fondos aportados por los mismos donantes
también han permitido que la OIM preste diversos tipos de
asistencia humanitaria a más de 73.000 ancianos Sinti y
Romas, testigos de Jehová, minusválidos u
homosexuales, víctimas del Régimen Nazi; dicha
asistencia ha comprendido paquetes de alimentos y de productos
sanitarios y combustibles, así como asistencia médica
y jurídica a través de los Programas Humanitarios y
Sociales (HSP). Ahora bien, estos últimos llegarán a
su término en marzo de 2006 al haberse agotado los fondos
disponibles.

Norbert Wühler, Director de los Programas
de Indemnización de la OIM dijo: “Nos ha sorprendido
el enorme impacto de estos programas en las víctimas y en
sus herederos. Seguimos recibiendo cientos de cartas, mensajes por
correo electrónico y llamadas telefónicas de
sobrevivientes y beneficiarios que expresan su agradecimiento y que
aprecian especialmente que su sufrimiento haya sido finalmente
reconocido”.

Lidia S., ex trabajadora forzada
búlgara, dijo: “El importe que he recibido fue
sumamente útil para comprar medicinas y para otros gastos,
pero sobre todo para calmar mi alma. Es difícil recordar el
pasado, pero también es necesario hacerlo”. Robert P.,
un ex trabajador forzado francés, manifestó:
“Ahora, 60 años después recién podemos
decir que nos han testimoniado un reconocimiento. Les agradezco en
nombre de todos los que sufrieron durante la guerra. Ustedes nos
han ayudado a poner un punto final a ese triste periodo”.

A través de sus programas para
víctimas del Holocausto, la OIM ha tenido que identificar
solicitantes potenciales, elaborar y difundir a través del
mundo los formularios de solicitud en muchos idiomas, proveer
asistencia a los solicitantes, tramitar las solicitudes, notificar
a los solicitantes y pagar a solicitantes con derecho a la
indemnizaciónen todos los rincones del planeta. Los dos
programas de indemnización llegarán a su
término el 30 de septiembre de 2006 y todos los fondos que
la OIM no haya utilizado para efectuar indemnizaciones se
reintegrarán a los donantes. Tras este plazo final no se
efectuará ningún pago adicional a las víctimas
que reúnan los requisitos o a sus herederos legales.

La OIM fue creada con el objeto de prestar
asistencia a los refugiados y los desplazados en Europa a
raíz de la Segunda Guerra Mundial. Cuando han transcurrido
más de 60 años, la OIM ha establecido un
vínculo con su historia a través de estos Programas
de indemnización para las víctimas del Holocausto. En
este lapso de tiempo, su labor se ha extendido para abarcar una
esfera de actividades de reclamos e indemnizaciones más
amplia, que forma parte de un importante empeño con miras a
la consolidación de la paz y la reconciliación tras
conflictos. En los últimos cinco años, la OIM ha
adquirido una experiencia considerable y única en el
ámbito de las reclamaciones e indemnizaciones y en la
resolución de litigios por bienes en situaciones
posconflicto, para los cuales se ha recurrido a la
Organización a fin de que aporte su asesoramiento experto,
su asistencia técnica y contribuya al fortalecimiento
institucional.