En el Cáucaso Meridional, muchas personas se han decidido a abandonar sus comunidades de origen y migrar de zonas rurales a urbanas, o incluso a otros países, por la persistencia en la región de unas condiciones socioeconómicas precarias –recientemente agravadas a raíz de la pandemia de la enfermedad coronavírica de 2019 (COVID-19)–, así como por la percepción de que trabajando en el extranjero se pueden alcanzar mejores condiciones de vida. Sin embargo, con el paso de los años, también han sido muchos quienes han optado por retornar a su país y, a menudo, han experimentado dificultades en su reintegración debido al aislamiento y la falta de recursos económicos. Habida cuenta de este contexto regional, la presente iniciativa tiene por objeto aprovechar el potencial de los migrantes que retornan en favor de la estabilidad social y el bienestar económico de las comunidades locales del Cáucaso Meridional. Para ello, se tomarán como base las enseñanzas extraídas en la labor con comunidades de Georgia, cuyo alcance temático y geográfico se ampliará posteriormente en Armenia. Este proyecto, que tiene su origen en el enfoque integrado de la OIM en materia de reintegración, se concibe con el propósito de alentar a largo plazo la adopción de políticas que aborden el retorno y la reintegración desde un prisma individual, comunitario y estructural. A tal fin, se fomentará a medio plazo que los migrantes que retornan disfruten de mejores oportunidades para la reintegración sostenible y la intervención en el desarrollo local, centrándose sobre todo en facilitar el acceso a información y garantizar la participación en iniciativas que promuevan la empleabilidad y la inclusión social de las personas. Asimismo, se facilitará el diálogo entre los dos países concernidos por el proyecto, el intercambio de buenas prácticas y la prestación de apoyo para aplicar un enfoque pangubernamental a nivel nacional y regional en lo referente a las políticas y prácticas de reintegración.