Esta semana se ha celebrado en Nueva York
un taller de expertos sobre “Mujeres Migrantes: Cerrar las
brechas en el ciclo de la vida”, patrocinado por la OIM y el
Fondo de Población de Naciones Unidas (UNFPA).

Más de 50 participantes asistieron a la
reunión, entre ellos representantes y expertos de
países de origen, tránsito y destino de todos los
continentes, así como representantes de agencias
internacionales como la División del Adelanto de las Mujeres
de Naciones Unidas, el Asesor Especial sobre el Adelanto de las
Mujeres, el Banco Mundial, la OIT y UNIFEM, así como ONG y
organizaciones de la diáspora.

En los últimos 40 años, la
migración de las mujeres va en aumento. En la actualidad,
las mujeres constituyen más de la mitad de la
población migrante del mundo, que se calcula que asciende a
192 millones. Sin embargo, sigue habiendo la necesidad de
documentarse y recabar datos sobre las experiencias de las mujeres
migrantes.

Todo indica que la migración puede dar
lugar al empoderamiento de las mujeres, ya que las mujeres ganan en
autonomía, toman sus propias decisiones, pasan a ser agentes
económicos activos y desempeñan un papel primordial
en las familias que dejan atrás. No obstante, esto no
siempre es así. Las mujeres tienen menos oportunidades que
los hombres de migrar legalmente, a menudo porque los esfuerzos de
reclutamiento se centran con frecuencia en sectores de empleo
dominados por los hombres.

A este respecto, las mujeres migrantes no
cuentan en su país de origen con el mismo sistema de apoyo
y, a menudo, su única opción pasa por la
migración irregular y se ven expuestas a las peores formas
de abuso, debido a su doble vulnerabilidad como migrantes y
mujeres.

Dado que las mujeres migrantes trabajan a
menudo en sectores de la economía con segregación de
género y no regulados, están muy expuestas a la
discriminación de género, la trata de personas y la
violencia. Las mujeres migrantes que retornan a su país de
origen tras varios años en una situación de
empoderamiento y con nuevas ideas hacen frente también a
nuevos retos sociales, ya que se tienen que adaptar a sus
sociedades y familias.

El taller se centra concretamente en
identificar las brechas y los retos durante el ciclo de la vida de
las mujeres migrantes, las tendencias migratorias, las necesidades
sanitarias reproductivas de las mujeres migrantes, la
migración y los derechos humanos, la violencia contra las
mujeres migrantes y la trata de mujeres y niñas, la
cobertura de lagunas en la investigación sobre la
migración y los datos desagregados del género,
así como las políticas gubernamentales que pueden ser
positivas para el empoderamiento de las mujeres migrantes.

Los participantes se pusieron de acuerdo sobre
la importancia de recabar datos segregados de género y
ratificar los mecanismos de protección, y subrayaron la
importancia de compartir buenas prácticas y las lecciones
aprendidas entre todas las partes interesadas. Se destacó la
importancia de que haya coherencia entre las políticas de
los ministerios gubernamentales nacionales y las partes
internacionales interesadas. También se señaló
la necesidad de tener marcos bilaterales para desalentar la
migración irregular.

La OIM y el UNFPA recopilarán y
publicarán las presentaciones y recomendaciones de este
taller, que fue organizado como una contribución a las
conversaciones previas al Diálogo de Alto Nivel de Naciones
Unidas sobre Migración y Desarrollo en la Asamblea General
en septiembre de 2006.

Si desea más información,
póngase en contacto con

Anke Strauss

la OIM de Nueva York

Tel: +1-212-681-7000 ext. 203

E-mail: "mailto:astrauss@iom.int" target="_blank" title=
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