República Democrática del Congo – La OIM colabora con autoridades y socios humanitarios en la República Democrática del Congo (RDC) para evaluar la situación de unos 39.500 migrantes irregulares congoleños que, a lo largo de las seis semanas pasadas, han retornado voluntariamente a su país desde Angola antes de la fecha límite del 15 de mayo en la que se les ha amenazado con expulsarlos.

Los retornados, entre los que se cuentan más de 8.400 mujeres y menores, se concentran en las inmediaciones de un control fronterizo en Kamako (provincia de Kasai Occidental), en la frontera con Angola.  Debido a este éxodo, los servicios en la zona están al límite de su capacidad y la falta de refugio temporal ha llevado a los retornados a buscar refugio en escuelas, iglesias y otros espacios comunitarios.  Solo se han encontrado 17 instalaciones sanitarias básicas en los alrededores.

Actualmente la OIM colabora con el grupo de trabajo nacional de la RDC sobre angoleños expulsados para llevar a cabo una evaluación, en coordinación con el Comité interinstitucional provincial de Kananga, para determinar la cifra de retornados, sus vulnerabilidades y las de las comunidades de acogida, evaluar la capacidad local y definir ámbitos prioritarios de intervención.

Asimismo, la Organización prevé utilizar su capacidad de seguimiento de los desplazamientos para rastrear los movimientos del grupo, determinar la evolución de sus necesidades, en particular las de los más vulnerables, y proporcionar asistencia humanitaria específica.

Con experiencia en la evaluación de las necesidades multisectoriales, la OIM en Angola ampliará su presencia a las oficinas de terreno pertinentes a lo largo de la frontera entre Angola y la RDC, además de coordinarse con la OIM en la RDC.

La causa de los retornos reside en un acuerdo alcanzado entre los gobernadores de las provincias de Kasai Occidental (RDC) y Luanda Norte (Angola) con objeto de facilitar el retorno voluntario de los migrantes congoleños irregulares que residen en Angola.

A continuación las autoridades angoleñas anunciaron la fecha del 15 de mayo como plazo límite para los retornos voluntarios, tras la cual se reservaban el derecho de expulsar a los migrantes congoleños irregulares que permanecieran en el país.

En estos momentos la OIM trabaja junto con la RDC, que tiene fronteras con nueve países, para fortalecer su sistema de gestión integrada de fronteras.  Esta creación de capacidades comprende la incorporación de principios humanitarios a la gestión fronteriza, enfoque concebido para hacer frente a este tipo de emergencias.

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Charlie Sell
OIM Kinshasa
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