Cerca de 18.000 desplazados (aproximadamente 3.000 familias) de
Harare y Mashonaland central, principales provincias de Zimbabwe,
se beneficiarán de un nuevo programa basado en la
provisión de material de emergencia imprescindible para la
vida y de ayuda a la protección de desplazados internos y
retornados.

Ambas provincias se vieron gravemente afectadas por las olas de
desplazamientos provocadas, en 2008, a consecuencia de la violencia
y de varias iniciativas políticas, entre las que se incluye
la adquisición de granjas, actividad que ha provocado
continuos desplazamientos.

Las evaluaciones rápidas conjuntas realizadas por la OIM
y sus colaboradores en enero, febrero y junio de 2009 en 157
comunidades de 20 regiones de las provincias de Harare, Manicaland,
y Mashonaland central, oriental y occidental revelaron que 14.305
familias de desplazados necesitaban ayuda inmediata, inclusive
refugio, artículos alimentarios y no alimentarios, medios de
subsistencia, apoyo jurídico y protección de los
derechos ciudadanos, especialmente de la integridad física y
de la seguridad.

El programa, que cuenta con una financiación de US$
410.000 por parte del Fondo central de las Naciones Unidas para la
acción en casos de emergencia (CERF), será
implementado de manera conjunta por la OIM y el ACNUR mediante
asociados en la ejecución.

Asimismo, se ha desarrollado una estrategia para responder a las
necesidades de protección de los desplazados.  La OIM
se basará para ello en medidas para combatir las amenazas de
la seguridad física y la persecución de poblaciones
desplazadas proveyendo refugio de emergencia, artículos no
alimentarios, apoyo psicosocial a los supervivientes de la
violencia y elaborando iniciativas de terapia y
reconciliación.

El ACNUR se concentrará en las actividades de
reconstrucción de los medios de subsistencia de los
desplazados internos y los retornados, de las clínicas
móviles que proporcionan asesoramiento jurídico y
orientación psicopedagógica y en el establecimiento
de redes destinadas a los trabajadores de la comunidad.

"Invertir en intervenciones de salvamento de emergencia es
fundamental ya que ofrecen a los desplazados la protección
física que tanto necesitan.  Proporcionar refugio,
necesidades básicas y oportunidades para ganarse la vida es
una manera segura de ofrecer protección a los
desplazados.  Sin ello y después de haber perdido sus
hogares y medios de subsistencia, son especialmente vulnerables a
cualquier tipo de violencia y abusos", explica Marcelo Pisani, Jefe
de la misión de la OIM en Zimbabwe.

Asimismo, la distribución de tratamiento inmediato
será garantizada gracias a otro proyecto conjunto de la OIM
y el ACNUR, financiado también por el CERF, y destinado a
combatir la malnutrición en menores y adultos de 11 de las
zonas más afectadas a nivel nacional.  Según el
UNICEF, las cifras nacionales de malnutrición aguda se
elevan a un 7 por ciento, muy pobre con respecto a los umbrales de
emergencia de la OMS.

Para ofrecer sus servicios, la OIM desplegará los equipos
sanitarios móviles que ya atienden a las poblaciones
desplazadas mientras que el UNICEF se encargará de la
coordinación general para garantizar que el tratamiento
pertinente llega a tiempo a los menores afectados de
malnutrición aguda en las 11 regiones con mayor inseguridad
alimenticia del país.

Para más información, póngase en contacto
con:

Judith Chinamaringa

OIM Zimbabwe

Tel. +263 4 33 50 48

E-mail: "mailto:jchinamaringa@iom.int">jchinamaringa@iom.int