Comunicado
Global

Lucha enconada de las familias iraquíes retornadas encabezadas por una mujer

Según afirma la OIM, el acceso a alimentos y atención
sanitaria así como la falta de trabajo siguen siendo los
principales obstáculos para la recuperación de las
familias iraquíes retornadas encabezadas por una mujer.

En su último estudio sobre los desplazamientos en Iraq,
la OIM evalúo a 1.355 familias desplazadas encabezadas por
una mujer y que habían retornado a sus hogares.

A pesar de que estas familias disponen de tarjetas
válidas de distribuciones públicas,
permitiéndoles el acceso a raciones alimentarias, un 74% de
ellas debe realizar enormes esfuerzos para alimentar de manera
adecuada a sus familiares. Este problema se agrava cuando las
raciones se reciben con retraso o incompletas, ya que las mujeres
deben gastar los escasos fondos de los que disponen en la
adquisición de comida.

Pero eso no es todo. La mayoría de mujeres no puede
trabajar o no encuentra trabajo.  Cerca de un 40% de las
encuestadas señalaron su imposibilidad para trabajar debido
a problemas de salud o a las normas sociales. Del resto, un
71% estaba desempleada.

«Estas mujeres tienen que sacar adelante a sus hijos y a
sus mayores.  Sin un ingreso regular, se vuelven dependientes
de cualquier tipo de ayuda, pero ésta no es
sistemática», asevera Antonio Salanga, jefe del centro
regional de la OIM en Bagdad.

De las personas estudiadas, un 40% afirmó depender de
familiares, vecinos, grupos religiosos y organizaciones
humanitarias para subsistir.

Otro de los motivos de preocupación entre las encuestadas
es la falta de acceso a la atención sanitaria. 
Aproximadamente un 25% de las familias entrevistadas contaba con un
familiar afectado por una enfermedad crónica, mientras que
una de cada cuatro no tenía acceso alguno a la
atención médica.

Además, existe un importante riesgo de contraer
enfermedades transmitidas por el agua, ya que un gran número
de familias depende de tuberías abiertas o dañadas,
ríos, arroyos y otras fuentes inseguras para su
abastecimiento.

Igualmente, las mujeres cabezas de familias se encuentran
sometidas a un enorme estrés psicológico y
social. Las casadas o divorciadas han tenido que escapar de la
violencia por motivos de género, cuyos casos han
experimentado un aumento considerable durante los últimos
cinco años, coincidiendo con la mayor crisis de
desplazamiento de la historia reciente del país.  A
nivel nacional, una de cada cinco mujeres iraquíes sufren la
violencia física y una de cada tres, la violencia
emocional. Todo ello ha resaltado la necesidad de apoyo
psicosocial y ayuda jurídica para los hogares encabezados
por una mujer con el fin de garantizar su seguridad física y
mental.

En la actualidad, la OIM lleva a cabo en los municipios de
Bagdad, Diyala y Missa un programa piloto de ayuda psicosocial,
jurídica y a los medios de vida destinado a los desplazados
internos más vulnerables y a las familias retornadas
encabezadas por una mujer. Este programa ha sido financiado
por la Oficina de Población, Refugiados y Migración
(PRM) del Departamento de Estado de los Estados Unidos e incluye
asesoramiento individual y en grupo, asistencia médica y
custodia de menores.  Las mujeres se benefician también
de una formación profesional que les brindará la
posibilidad de encontrar empleo o de realizar actividades
generadoras de ingresos.

Para más información, póngase en contacto
con:

Antonio Salanga

OIM Iraq

Tel: +964 781 437 3395 

       +962 6 565 9660

E-mail: "mailto:asalanga@iom.int">asalanga@iom.int