Filipinas - Gracias a la asistencia de la OIM, un grupo de 270 trabajadores migrantes filipinos, quienes se alojaban en las instalaciones de la Embajada de Filipinas en Damasco, han sido repatriados.

Desde que el conflicto estallara, en marzo de 2011, y a petición del Gobierno de Filipinas, la OIM ha repatriado a 1.206 migrantes filipinos desde Siria.
 
Debido a los enfrentamientos entre las fuerzas gubernamentales y los rebeldes alrededor del aeropuerto de Damasco, casi todas las aerolíneas han suspendido los vuelos a la capital siria.  Así pues, la Embajada de Filipinas se vio obligada a trasladar a los migrantes en autobús hasta el Líbano.  Una vez allí, la OIM se ocupó de su repatriación, a bordo de un vuelo chárter que partió de Beirut, la capital del Líbano.

Esta evacuación se ha producido tras el recrudecimiento de los enfrentamientos en el distrito de Mezzeh, a menos de un kilómetro de la Embajada de Filipinas.  Los funcionarios allí empleados han señalado también el deterioro de las condiciones de vida en las instalaciones de la embajada, debido a la superpoblación y la llegada del frío.

“Ahora que se acercan las vacaciones, esta es una buena noticia tanto para los trabajadores como para los familiares.  La OIM se congratula de seguir colaborando con los gobiernos de sus Estados Miembros para facilitar el retorno seguro de los migrantes atrapados en situaciones como esta y en las que sus vidas corren peligro”, concluye José Pimentel, jefe de la misión de la OIM en Filipinas.

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Kent Madarcos
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