Comunicado
Global

La OIM Lituania entrega calentadores para las personas que padecen frío en las zonas del este de Ucrania afectadas por el conflicto

Un anciano que reside en Verkhnotoretske, Región de Donetsk, recibe su calentador eléctrico de parte de la OIM. Foto: OIM.

Kyiv – Por quinta vez consecutiva, el invierno y sus duras temperaturas bajo cero plantean desafíos amenazantes para la vida y la salud para las personas afectadas por el conflicto en la zona este de Ucrania. Los más ancianos, que representan el 30% de tales personas son los que más sufren. La comunidad humanitaria está haciendo esfuerzos para poder brindar asistencia a las personas más vulnerables para poder paliar el invierno en la zona de conflicto al este de Ucrania.

Como parte de dicho esfuerzo, la Organización Internacional para las Migraciones (OIM) – con financiamiento del Ministerio de Asuntos Exteriores de la República de Lituania – está trabajando actualmente en la distribución de calentadores eléctricos y estufas de hierro forjado a los residentes de las pequeñas ciudades de Novotoshkivske, Orikhove (Región de Luhansk), Verkhnotoretske, Pivnichne y Druzhba (Región de Donetsk).

Estos asentamientos a lo largo de la línea de contacto en las áreas controladas por el gobierno sufren  bombardeos, falta de infraestructura vital, restricciones de movimiento y contaminación por la colocación de minas.

Más de 500 familias, entre las cuales se incluyen las monoparentales, familias de tres y más hijos, personas con discapacidades y ancianos recibieron esta asistencia tan importante que los ayudará a enfrentar el crudo invierno. Esto es especialmente importante si se tiene en cuenta la extrema vulnerabilidad financiera de los beneficiarios de la OIM y el alto precio del combustible sólido – carbón o leña – que la mayor parte de los hogares utiliza.

Con anterioridad al conflicto, Olha Stepanivna, una pensionada de la localidad de Pivnichne, solía vivir en su apartamento con calefacción central. Pero debido a los constantes bombardeos, tuvo que mudarse a su casa en la aldea, la cual era mucho menos confortable pero ubicada en un lugar más seguro. Dijo que el calefactor eléctrico que recibió es sumamente útil, porque no podía darse el lujo de comprarse uno. “Ahora lo voy a colocar en el dormitorio y podré regular mejor la temperatura, intentando de tal modo reducir mi consumo de carbón y ahorrar un poquito de mi pequeña pensión”, sostuvo.

Recientemente, las agencias humanitarias solicitaron la suma de 162 millones de dólares estadounidenses para poder responder a la situación humanitaria en la zona este de Ucrania.  

“Luego de casi cinco años, las capacidades de las personas se han agotado, forzándolas a hacer elecciones duras y difíciles en cuanto a comer, comprar medicamentos, enviar a sus hijos a la escuela o estar con calefacción en sus hogares”, dijo el Jefe de Misión de la OIM en Ucrania, el Dr. Thomas Lothar Weiss.

“Además, la cifra de personas que necesitan asistencia humanitaria y protección, y que actualmente se estima en 3.500.000 personas, aumentó el año pasado debido a la amplia contaminación de los terrenos por la colocación de minas y el impacto psicológico y mental prevalente del conflicto. Ucrania no debe ser olvidada”, agregó Weiss.

Para mayor información por favor contactar a Varvara Zhluktenko en la OIM Ucrania, Tel. +38 044 568 50 15 o +38 067 447 97 92, Email: vzhluktenko@iom.int