Comunicado
Global

La OIM hace un llamamiento por la suma de 119.3 millones de dólares para poder brindar apoyo a las respuestas humanitarias y de desarrollo en Sudán del Sur

Una mujer parada afuera de un albergue en el sitio de la ONU para protección de civiles en Wau, Western Bahr el Ghazal, Sudán del Sur. Foto: OIM

Juba – La nación más joven del planeta, Sudán del Sur, que ya ha tenido que soportar cinco años de guerra civil, debe enfrentar un proceso de recuperación muy complicado. Las agencias de asistencia estiman que casi 7.5 millones de sudaneses del sur padecen la necesidad de recibir asistencia humanitaria inmediata. Cerca de 1.5 millones de personas siguen en situación de desplazamiento interno mientras que otros 2.2 millones se encuentran en países vecinos.

En semanas recientes la nación del este africano ha sido castigada también por una invasión de langostas del desierto que amenazan la situación de seguridad alimentaria de millones de personas.

Contra este telón de fondo la Organización Internacional para las Migraciones (OIM) lanzó su Pedido Consolidado 2020 que se basa en el Plan de Respuesta Humanitaria 2020 para Sudán del Sur por el cual solicitó la suma de 119.311.000 dólares para paliar las necesidades de las personas desplazadas internamente (IDPs), retornados, miembros de las comunidades de acogida y migrantes en todo el país.

El Pedido Consolidado reconoce las significativas necesidades que persisten en todo Sudán del Sur, como fuera puesto de relieve en el Resumen 2020 de Necesidades Humanitarias. Los efectos de años de conflicto y desplazamiento siguen impactando a los sudaneses del sur a lo largo de todo el país y en el exterior, y el país padece pobreza sostenida, períodos de escasez de alimentos, preocupaciones persistentes en materia de protección y una falta de medios de subsistencia y acceso a servicios básicos, con mujeres y jóvenes que también se ven afectadas de manera desproporcionada.

Por medio de asistencia humanitaria y de un enfoque integrado de múltiples sectores, en donde la gobernanza, la gestión de la migración, y la transición, recuperación y estabilización complementan las intervenciones humanitarias, la OIM continuará asegurando la provisión sostenida de respuestas vitales que brinden apoyo a las personas desplazadas internamente, retornados y comunidades de acogida en todo el país, y asegurando el acceso equitativo de mujeres y jóvenes de ambos sexos a los servicios.

“En 2019, la OIM recibió un gran apoyo de parte de la comunidad de donantes, y tenemos la esperanza de que este año no será diferente”, dijo Jean-Philippe Chauzy, Jefe de Misión de la OIM Sudán del Sur.

“Convocamos a la comunidad de donantes para seguir brindando apoyo a los pobladores de Sudán del Sur mientras reconstruyen sus vidas en pos de lograr una paz duradera como fuera prometido en el Acuerdo Revitalizado de Paz”, agregó Chauzy.

El Pedido Consolidado 2020 de la OIM pone las necesidades de los sudaneses del sur desplazados, retornados y las comunidades de acogida en el centro de sus programas. Esto es impulsado por los esfuerzos humanitarios, de desarrollo, para la consolidación de la paz y en materia de gobernanza. La OIM sigue brindando servicios centrales esenciales tales como respuestas en materia de salud, agua, sanidad e higiene y la provisión de apoyo en materia de salud mental y psicosocial en tanto que la protección y la salvaguarda de los beneficiarios siguen siendo los pilares fundamentales de todas las actividades de la OIM.  

La OIM brinda su apoyo a la cohesión social, a la mitigación de los conflictos y a las iniciativas efectivas para la consolidación de la paz y sigue estando firme en su compromiso de trabajar junto al gobierno para aumentar sus conocimientos técnicos y fortalecer la capacidad institucional sobre gestión de la migración y de las fronteras, como parte de los esfuerzos para lograr sustentabilidad a largo plazo.

El CAP 2020 reconoce que mientras Sudán del Sur sigue luchando por la devastación causada por la guerra civil que duró cinco años, hay una nueva oleada de optimismo y la oportunidad de seguir implementando actividades ininterrumpidas y efectivas, humanitarias y de desarrollo, como por ejemplo la provisión de apoyo para infraestructura y el inicio de programas para la generación de ingresos en las áreas de retorno.

“Hemos podido ver el impacto logrado con nuestro apoyo a los esfuerzos en materia de gobernanza en 2019, con el desarrollo de la primera Política Integral Migratoria en la historia del país, la formación de la Fuerza Técnica de Tareas de Lucha contra la Trata de Personas y el Tráfico de Migrantes, y la Política para la Selección de Tierras cuya aprobación en el Parlamento ya está programada”, sostuvo Chauzy.

“Contamos con una ventana a la cual podemos golpear para apelar a la naturaleza resiliente de los habitantes de Sudán del Sur. El CAP 2020 ofrece una plataforma de lanzamiento de tal actividad”, agregó.

Conscientes de las grandes necesidades humanitarias y en materia de desarrollo no solamente en Sudán del Sur sino también en todo el mundo que sobrepasan en gran medida la disponibilidad de recursos, la OIM espera recibir un apoyo favorable de parte de los donantes.

“Confiamos en que la OIM y las comunidades a las cuales prestamos servicios en todo Sudán del Sur puedan contar con el apoyo brindado por los donantes, que es tan necesario a lo largo de un año que yo creo será absolutamente decisivo para este país”, dijo finalmente Chauzy.

 

Para más información por favor contactar a: Liatile Putsoa en la OIM de Sudán del Sur, Tel: +211912380104, Email: lputsoa@iom.int