Suiza - La OIM encontró que el 76% de los casi 1.400 migrantes y refugiados entrevistados en Italia entre el 24 de junio y el 3 de agosto de 2016 –quienes viajaron por la ruta central del Mediterráneo entre el norte de África y Europa– respondieron afirmativamente a al menos un indicador sobre la presencia de trata de personas y otras prácticas de explotación en la ruta.

El objetivo de las encuestas anónimas es aportar datos fiables sobre los entornos de los viajes de los migrantes y refugiados, los peligros y riesgos a los que se enfrentan y su vulnerabilidad, a menudo extrema.

Los hallazgos recentes son los primeros descubrimientos derivados de las nuevas iniciativas de Italia para controlar los flujos migratorios a lo largo del norte de África y aportan pruebas contundentes sobre el comportamiento depredador de traficantes y tratantes de personas y sobre los tipos de entornos en los que prosperan la trata y formas conexas de explotación y abuso.

Un número considerable de migrantes y refugiados encuestados informó de experiencias directas de abuso, explotación o prácticas equivalentes a la trata, tales como secuestro, tortura y trabajos o servicios que no fueron remunerados como se había acordado. La mayoría de casos ocurrió en Libia.

Si durante la realización de la encuesta los entrevistadores se encuentran con personas que pueden estar necesitadas de protección, se les refiere de inmediato a proveedores de servicios especializados y/o la policía.

Aunque se han realizado muchas entrevistas, informes y estudios cualitativos para documentar el viaje de los migrantes y refugiados por esta ruta, no ha habido muchos intentos de cuantificación de la prevalencia de prácticas de explotación de las que los migrantes son objeto frecuente.

Los hallazgos de Italia son posteriores a una ampliación de las operaciones y la recolección de datos que comenzó a principios de este año en la ruta del Mediterráneo oriental. Sin embargo, estos últimos hallazgos reflejan que los índices de respuesta afirmativa a uno de los indicadores que los migrantes y refugiados encuestados dieron en Italia son hasta siete veces mayores que los índices de respuesta afirmativa en la misma encuesta realizada en la ruta del Mediterráneo oriental.

Desde junio de 2016, se ha entrevistado a casi 1.400 personas en Italia. En base a las propias experiencias directas durante el viaje, alrededor de un 76% de los encuestados respondió positivamente a al menos un indicador sobre la trata de personas y a otros indicadores sobre prácticas de explotación, tales como: haber trabajado o realizado actividades sin remuneración suficiente; haber sido obligados a realizar trabajos u otras actividades en contra de su voluntad; haber sido abordados por alguna persona que les ofrecía empleo; haber sido abordados por alguna persona que les ofrecía arreglar un matrimonio; y haber sido detenidos en algún lugar en contra de su voluntad por otras partes que no eran las autoridades gubernamentales pertinentes.

El 5% de los encuestados también declaró que un familiar que viajaba con ellos se había visto envuelto en situaciones captadas por uno de los indicadores de trata y explotación. Asimismo, aproximadamente el 5% de los encuestados dijo tener conocimiento de casos en los que compañeros de viaje habían sido abordados por alguna persona que les ofrecía dinero a cambio de la donación de sangre, órganos o partes del cuerpo. Según la mayoría, estos casos ocurrieron en Libia y en menor medida, en Egipto. Algunos migrantes comentaron a los entrevistadores que no les quedaba más remedio que dar su sangre durante su cautiverio. De hecho, el 81% de las personas que presenciaron estos hechos de coacción para la donación de sangre también informaron haber sido mantenidas en un lugar cerrado en contra de su voluntad.

Otros resultados del estudio se pueden consultar aquí.

“Dos tendencias que nos preocupan sobremanera son los cerca de 13.000 menores no acompañados que han desembarcado en Italia este año y las 5.346 mujeres nigerianas que consideramos son objeto de trata en un 80%”, declaró el Director de la Oficina de Coordinación de la OIM para el Mediterráneo en Roma, Federico Soda.

“En lo que va del año en Italia, la OIM ha identificado a más de 200 víctimas de trata en los puntos de desembarque, entre ellas niñas menores de edad, algunas de tan solo 13 años. Además, sabemos que las amenazas y la violencia que los traficantes perpetran en el país de origen en contra de las familias de las víctimas son cada vez más devastadoras”, agregó.

“El aumento en el número de menores no acompañados es también muy preocupante. Estos menores son sumamente vulnerables y están en riesgo de trata con fines de explotación sexual y laboral. A menudo los menores desconocen totalmente esta realidad. Los sistemas de protección a lo largo del proceso de migración deben reforzarse para encontrar soluciones que estén en el mejor interés del niño y que garanticen sus derechos”, indicó Soda.

Los encuestados que respondieron positivamente a uno de los indicadores eran de 23 años de edad en promedio; en su mayoría las respuestas afirmativas se obtuvieron de migrantes y refugiados de entre 18 y 25 años de edad (52%). En su mayoría las respuestas positivas eran de personas de Gambia (91%), Ghana (91%), Guinea (90%) y Côte d’Ivoire (86%).

La OIM está consagrada al principio de que todos los migrantes tienen derecho a la plena realización de sus derechos. La Organización sigue instando a una mayor capacidad de identificación, mayor disponibilidad de refugios especializados, y mayor acceso a servicios jurídicos para personas que han sido objeto de trata o que hayan sido explotadas de alguna manera, así como personas que son especialmente vulnerables al abuso, la trata y otras prácticas de explotación.

La OIM sigue prestando asistencia sensible a la protección de migrantes y refugiados recién llegados en los puntos de desembarque y recepción en Italia, incluido el asesoramiento en materia jurídica y otras actividades de asistencia directa. Asimismo, la OIM apoya a las autoridades en la identificación de víctimas de trata, personas necesitadas de ayuda urgente y personas vulnerables al abuso, la trata y otras prácticas de explotación. Estas actividades se podrán fortalecer a partir de los resultados de la encuesta.

Por otro lado, en el norte de África la OIM ha llevado a cabo una serie de iniciativas para combatir la trata de personas, en colaboración con migrantes, gobiernos, ONG asociadas, la sociedad civil y comunidades de acogida. En Libia se presta asistencia directa a migrantes rescatados en el mar, migrantes desamparados y migrantes detenidos, lo que incluye el alivio inmediato con artículos de consumo y una muda de ropa, así como atención médica y psicosocial. La OIM sigue trabajando con la Guardia Costera de Libia en la identificación de víctimas de trata para ampliar las medidas de protección de migrantes que han sido objeto de trata.

Las víctimas de trata en Libia corren especial riesgo ya que no solo han sido víctimas de trata y explotación sino que se encuentran en un país que ha sido sacudido por la inestabilidad durante los últimos cinco años. La OIM elaboró un documento de orientación para los gobiernos y trabajadores humanitarios sobre la manera de trabajar con víctimas de trata en un entorno de crisis.

La OIM ha llevado a cabo campañas de información en Libia, Túnez, Egipto e Italia para asegurarse de que los migrantes y ciudadanos en riesgo de migración irregular conozcan los peligros como la trata de personas, sobre todo a lo largo de la ruta central del Mediterráneo.

La encuesta fue realizada con el apoyo del Departamento de Asistencia al Migrante de la OIM. Las operaciones de monitoreo de los flujos migratorios que realiza la DTM de la OIM en Europa fueron financiados por la Dirección General de Ayuda Humanitaria y Protección Civil de la Comisión Europea (ECHO por sus siglas en inglés), la Agencia Suiza para el Desarrollo y la Cooperación (COSUDE) y el Departamento del Reino Unido para el Desarrollo Internacional (DFID por sus siglas en inglés). Aquí se puede obtener información adicional sobre las operaciones de la OIM para el seguimiento de los flujos migratorios.

Para obtener información adicional, por favor ponerse en contacto con Harry Cook, OIM en Ginebra, Tel: +41 227 179 502, Email: hcook@iom.int o Flavio Di Giacomo, OIM en Italia, Tel: +39 347 089 8996, Email: fdigiacomo@iom.int