Comunicado
Global

La OIM asiste a más de 350.000 personas afectadas por sequía extrema en Somalia, mientras millones necesitan apoyo

Una mujer mayor acarrea un bidón tipo jerry con agua desde un pozo de perforación en Ladan, un asentamiento informal que alberga a casi 3.000 personas desplazadas en Dollow. La mayor parte de las personas que están viviendo allí han sido desplazadas por la sequía (mayo 2022).  Foto: Claudia Rosel/OIM

Mogadishu – Más de 7,1 millones de personas – casi la mitad de la población total – están enfrentando niveles históricos de sequía en Somalia. La Organización Internacional para las Migraciones (OIM) está aumentando su respuesta y ha asistido a más de 350.000 personas afectadas por esta sequía – que es la peor de la que se tiene registro en décadas tras la cuarta temporada consecutiva fallida de lluvias.

Casi 800.000 personas han sido desplazadas por este fenómeno desde principios de 2021, al menos medio millón de ellas en los primeros cuatro meses de este año. Las mujeres y los menores representan un 80% de la población recientemente desplazada.

Las necesidades más acuciantes son las de acceder a alimentos, agua potable, cuidados de la salud y albergue, en tanto que 213.000 personas padecen niveles extremos de hambruna.

La OIM está aumentando su respuesta y trabajando muy estrechamente con el Gobierno, con organismos de las Naciones Unidas y con asociados locales para evitar la hambruna y abordar las acuciantes necesidades de contar con agua potable de las personas internamente desplazadas (IDP), migrantes y otros grupos vulnerables. Desde que el año empezó, los equipos han llegado a cientos de miles de personas a través de apoyo vital inmediato, incluyendo el transporte de agua de emergencia a través de camiones, infraestructura para la provisión de agua, albergues, artículos no alimentarios, artículos familiares, apoyo psicosocial y de salud mental e información.

Las condiciones de sequía extrema están profundizando la crisis humanitaria de Somalia, que ya lleva décadas y que ha sido provocada por conflictos, inestabilidad, impactos climáticos recurrentes y brotes de enfermedades. La escasez aguda de agua, la muerte del ganado – unos 3 millones de cabezas – y el aumento en el precio de los alimentos agravan las necesidades de millones de personas que necesitan recibir apoyo lo antes posible mientras el país tal vez tenga que enfrentar una posible quinta temporada fallida de lluvias más adelante este año – un evento climático que tal vez tenga consecuencias fatales si no se toman medidas inmediatas.

La OIM está entregando a las familias desplazadas Asistencia en Efectivo con Propósitos Múltiples (MPCA) a fin de apoyarlas para que puedan paliar sus necesidades inmediatas a la par que se asegura la flexibilidad y la dignidad de elección, puesto que esta asistencia contribuye en la rehabilitación y la construcción de nueva infraestructura para la provisión de agua, incluyendo pozos de perforación y manantiales superficiales en zonas rurales con el objetivo de reducir el desplazamiento.

En abril la OIM junto al Programa Mundial de Alimentos, UNICEF y otros asociados humanitarios, lanzó un Paquete Mínimo de Respuesta (MRP por su sigla en inglés), una modalidad de asistencia para algunas de las zonas más afectadas del país. Por medio del MRP los asociados procuran brindar socorro vital inmediato que incluye dinero en efectivo, artículos para construir albergues, y kits de higiene a más de 90.000 personas desplazadas recientemente en Baidoa, Kismayo y Dollow.  El MRP también permitirá ampliar el acceso de las comunidades desplazadas a agua potable, letrinas, y servicios de salud y nutrición.

Somalia se encuentra en la primera línea del cambio climático con patrones que se vuelven más difíciles de pronosticar cada año. La crisis climática está superando los esfuerzos emprendidos para salvar vidas y medios de subsistencia en el país. 

La respuesta brindada por la OIM y sus asociados servirá para prevenir consecuencias nefastas, pero es necesario recordar que las necesidades aumentan con gran rapidez mientras la situación vinculada a la sequía empeora.

Se necesita contar con más fondos cuanto antes para que la OIM pueda continuar con sus programas vitales esenciales y ayudar a las comunidades a adaptarse y soportar futuros impactos. La OIM solicita 66 millones de dólares EE.UU. para poder llegar a 1,25 millones de personas en Somalia a través de asistencia multisectorial hacia fines de febrero de 2023.

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Para más información: Claudia Rosel, Oficial de Prensa de la OIM Somalia, cbarrios@iom.int