Comunicado
Global

La diversidad en las pautas de la trata en África oriental pone de manifiesto la necesidad urgente de mayor protección

Una evaluación transfronteriza sobre la trata de personas en
Kenya y otros países vecinos realizada por la OIM ha
revelado la existencia de diferentes pautas que afectan a personas
de todas las edades y sexos, además de resaltar la elevada
necesidad de protección de las víctimas.

Este análisis fue presentado la semana pasada en Kenya
por la OIM durante un taller regional basado en la trata de
personas transfronteriza en África oriental. En él se
pone de manifiesto que, aunque en un primer momento la
población cruzaba las fronteras de manera voluntaria en
busca de mejores oportunidades, solían caer en situaciones
de explotaciones laboral, víctimas de una serie de
engaños de familiares, conocidos religiosos, hombres de
negocios y ex prostitutas.

Tal y como muestra el análisis, en Kenya existen
víctimas de la trata, incluidos menores, originarios de
Ruanda, Tanzania y Uganda que trabajan en la capital, Nairobi, como
empleados del sexo comercial, empleados domésticos o en
hoteles y en el sector agrario en distintos puntos del
país.  Las víctimas fueron identificadas en la
ciudad de Busia, en la frontera entre Kenya y Uganda.

Los menores suelen trabajar como pastores o en tiendas de
reparaciones de motocicletas en Oloitoktok, en la frontera entre
Kenya y Tanzania, o practicar la mendicidad en las calles de
Nairobi y Naivasha.

La OIM ha encontrado evidencia de menores, oriundos de Burundi,
Ruanda y Uganda, tratados en Tanzania para su explotación
sexual, pesca, servidumbre doméstica y trabajos
agrícolas.

Loas adultos suelen ser víctimas de explotación
para el trabajo doméstico, la minería, la agricultura
y el sector hotelero.

Según la evaluación de la OIM, los menores
ugandeses son tratados en todos los países de la
región, mientras que Uganda es un país de destino
para las víctimas originarias de Kenya, Tanzania y
Ruanda.  Además, se ha descubierto que la inestabilidad
de la República Democrática del Congo (RDC) favorece
el flujo de menores tratados en Uganda.  Las víctimas
suelen ser trasladadas por carretera, en autobuses y
camiones.  Los adultos oriundos de la RDC, Kenya y Ruanda
suelen ser obligados a trabajar en la servidumbre doméstica,
la agricultura, la pesca y la industria del sexo.

A pesar de la escasez de información disponible sobre
Ruanda, se le ha identificado como un país de origen de
víctimas de la trata destinadas a Italia, Noruega y los
Países Bajos, mientras que los menores son enviados a
Nairobi y a la ciudad costera de Mombasa (Kenya) para su
explotación sexual y el trabajo doméstico.

La ausencia de mecanismos de remisión que ofrezcan
protección y apoyo, sobre todo a las víctimas
adultas, es una de las principales carencias en la respuesta contra
la trata de personas en la zona.

Ruanda es el único país de la región donde
el gobierno, a través de la Policía y el Ministerio
de Género, ha establecido servicios de refugio y
líneas de acceso directo a través de los cuales
brindar ayuda a las víctimas de la violencia por
razón de género, incluidas las víctimas de la
trata.  No obstante, la inexistencia de mecanismos de
remisión adecuados a lo largo de sus fronteras dificulta los
esfuerzos realizados para agilizar el retorno y la
rehabilitación de las víctimas transfronterizas.

Los hallazgos de esta evaluación, utilizados en el taller
organizado por la OIM para 50 oficiales superiores de gobiernos de
África oriental, socios de la sociedad civil y expertos
internacionales, ha desencadenado la decisión de crear una
red de socios regionales, dirigida por la OIM, como primer paso
hacia la implantación de un mecanismo de remisión
operativo.

Asimismo, los participantes solicitaron la puesta en marcha de
un número de emergencias (116) para toda la
región.  El 116 es una línea de asistencia
directa para menores víctimas de la trata, reconocida
internacionalmente y que funciona en la actualidad en Kenya. 
Otras de las recomendaciones son: el establecimiento de una base de
datos regional y centralizada sobre la trata en la que se incluya
información relativa a los tratantes y que podría
compartirse con los organismos encargados del cumplimiento de las
leyes en la región; mayores investigaciones para determinar
la envergadura del problema en la zona; la armonización de
las leyes contra la trata en África oriental y el desarrollo
de procedimientos y estándares comunes en materia de lucha
contra la trata.

Para más información, póngase en contacto
con:

Tal Raviv

OIM Nairobi

Tel: +254 20 4444174, Ext. 217

E-mail: "mailto:traviv@iom.int">traviv@iom.int

o

Alice Kimani

Tel: +254 20 4444174, Ext. 225

E-mail:  "mailto:akimani@iom.int">akimani@iom.int