Addis Abeba – Etiopía enfrenta uno de los entornos más complejos del mundo en movilidad humana, con una variedad de factores sociales, económicos, políticos y climáticos que impulsan el movimiento de personas dentro y fuera de sus fronteras.

De acuerdo con el más reciente informe sobre Desplazamiento Nacional preparado por la Organización Internacional para las Migraciones (OIM), más de 1.800.000 personas en Etiopía siguen estando desplazadas a lo largo de unos 1.350 sitios. Al menos 1.200.000 más están retornando a cerca de 1.300 aldeas tras haber estado desplazadas. Etiopía tampoco pudo liberarse de la COVID-19 pues a mediados de marzo había registrado más de 175.000 casos y más de 2.600 fallecimientos.

Entre los asociados en el desarrollo es crucial el paso adelante dado por el Gobierno alemán para asistir a Etiopía. Desde 2019, Alemania ha brindado apoyo financiero por un monto de 18 millones de euros para los programas de la OIM Etiopía.

Más de 280.000 personas afectadas por la crisis se han beneficiado de la asistencia vital, incluyendo la construcción y rehabilitación de albergues, el acceso a agua segura y saneamiento, concientización sobre hábitos de higiene, y servicios para apoyo a la gestión de sitios en entornos similares a los campamentos.

Cuatro nuevos Puestos de Control Fronterizo (BCP) se han establecido y serán de gran utilidad para la reducción de las restricciones a la movilidad y la facilitación de los movimientos de mercaderías, servicios y capacidades. Más allá del comercio en sí, la OIM también considera a los BCP como vitales para proteger a las personas que pueden ser presa de los traficantes de migrantes y de los tratantes de personas. La capacidad del Departamento de Inmigración (INVEA) de Etiopía también pudo ser mejorada a través de la provisión de equipo y de capacitaciones.

Los fondos también han sido dirigidos al retorno oportuno, seguro y ordenado de más de 3.900 ex-combatientes y sus dependientes que en 2018 recibieron amnistía de parte del gobierno.

Y avanzando aún más, los y las jóvenes de Etiopía estarán en el foco de una nueva iniciativa que tendrá como objetivo brindarles mayor información acerca de los riesgos y consecuencias de la migración irregular. El inicio de la pandemia de COVID-19 ha también llevado a un aumento de la cifra de migrantes retornados, algunos de los cuales han sido repatriados forzosamente, en especial desde la Península Arábiga.

Maureen Achieng, Jefa de Misión de la OIM en Etiopía y Representante de la Unión de África y de la Comisión Económica de las Naciones Unidas para África, ponderó a Alemania por su constante compromiso con la estabilidad y la trayectoria para el desarrollo de Etiopía.

“Etiopía sigue luchando contra numerosos desafíos que en épocas recientes se han visto agravados por la pandemia de COVID-19”, dijo la Sra. Achieng. “En un contexto tan desafiante como este, la importancia del apoyo de un asociado tan resuelto como lo es Alemania, tanto en lo atinente a la provisión de acción humanitaria urgente y para iniciativas de desarrollo a largo plazo, no puede ser sobreestimada”.

Stephan Auer, Embajador de Alemania, enfatizó la importancia de la cooperación. “La OIM es un asociado decisivo para nuestro trabajo en Etiopía y aún más allá. Con su vasta experiencia como actor humanitario para la consolidación de la paz y el desarrollo, la OIM responde a algunos de los desafíos más importantes en el país. La promoción de una migración mejor y más segura y el apoyo a los migrantes vulnerables siguen siendo algunas de nuestras prioridades claves”.

Para más información por favor contactar con la OIM Etiopía: Krizia Kaye Viray, Móvil: +251993531220, Correo electrónico: kkviray@iom.int