La OIM, dentro de la Serie de investigación sobre la
migración, ha realizado un nuevo informe en el que examina
el impacto social y económico de las remesas enviadas por
los angoleños que residen en Portugal y Sudáfrica,
además de ofrecer una serie de recomendaciones para
maximizar el efecto de las mismas en el desarrollo de Angola.

Tal y como afirma el estudio, las antiguas relaciones
establecidas desde el periodo colonial entre Angola y Portugal, la
dinámica de la migración en la Comunidad del
África Meridional para el Desarrollo (SADC) y las
consecuencias del continuado conflicto armado que vive el
país ofrecen el contexto de los flujos migratorios desde
Angola hasta Portugal o Sudáfrica, estableciéndose en
la década de los 90 el periodo en que la mayoría de
angoleños abandonaron el país.

Según el informe, un 69,5 por ciento y un 91 por ciento
de los interrogados en Portugal y Sudáfrica,
respectivamente, son hombres.  La mayoría de los
migrantes en Portugal afirman pertenecer a la clase media o
media-baja, mientras que en Sudáfrica la mayor parte de
ellos dicen venir de un entorno socioeconómico pobre o de la
clase media-baja.

Asimismo, un 76,5 por ciento de los migrantes entrevistados en
Portugal y un 89,5 por ciento en Sudáfrica tienen un trabajo
a tiempo parcial o completo.

La mayoría de ellos, con bajos niveles de
titulación -tan sólo un 68,8 por ciento de los
participantes en Portugal y un 46,4 por ciento en Sudáfrica
han finalizado la educación básica-, realizan
trabajos mal remunerados, an la base de la jerarquía
profesional de ambos países.

No obstante, con el dinero percibido pueden mantener a sus
familias en Angola mediante el envío de remesas, que
constituye una importante fuente de ingresos adicionales para la
mayoría de los hogares estudiados.

Según el estudio, más de un 90 por ciento del
total de hogares en Angola recibieron remesas durante los
últimos 12 meses.  En un 38 por ciento de los casos,
este dinero representa de un 21 a un 80 por ciento de los ingresos
mensuales de la familia.

Para un 16 por ciento de los hogares, sin embargo, las remesas
son las únicas fuentes de ingresos.

En cuanto al empleo de las mismas, un 67 por ciento de los
encuestados afirma utilizarlas en necesidades básicas del
hogar, en la adquisición de productos de consumo y en el
pago de servicios públicos.  Un 14 por ciento las
destina a fines comerciales y, únicamente, un 1 por ciento
invierte una parte de ellas en actividades agropecuarias.

Los migrantes angoleños en Portugal y Sudáfrica
utilizan principalmente dos canales de envío de remesas:
servicios de envío (compañías de correos y de
envío de dinero) y entrega en persona.

Los servicios de envío cobran a los migrantes un 10 por
ciento de la cantidad enviada, mientras que la entrega en persona
no suele presentar coste alguno.

A pesar de que un 58 por ciento de los entrevistados en Angola
afirman recibir las remesas por transferencia bancaria, es bastante
improbable establecer el origen de las mismas en Portugal o
Sudáfrica, ya que los encuestados de ambos países
rara vez recurren a los productos bancarios para enviar el
dinero.

Al abordar al asunto del retorno, la mayoría de los
angoleños en Portugal y Sudáfrica afirman su
intención de querer regresar y de invertir en
pequeños negocios en un amplio abanico de sectores en su
país natal.

Algunos de estos proyectos, sin embargo, son de difícil
consecución debido a la falta de capital, de acceso a los
créditos y de habilidades necesarias o debido a las
dificultades relacionadas con el estatus migratorio.

Además, la mayoría de los angoleños en
Portugal (un 80 por ciento de los entrevistados) y en
Sudáfrica (62,3 por ciento) no pertenecen a ningún
tipo de organización o grupo debido a la falta de
interés, de tiempo y de información, a la
desconfianza frente a las iniciativas gubernamentales y al temor y
la reticencia de involucrarse en actividades que puedan estar
relacionadas con la política.

Para finalizar, el estudio ofrece tres recomendaciones
principales para establecer vínculos con los
angoleños que residen en el extranjero y para potenciar el
impacto de las remesas en el desarrollo del país.

Entre ellas se incluyen medidas de compromiso de los
angoleños con la diáspora a través de
intermediarios imparciales y apolíticos, mediante los cuales
afianzar la confianza, y medidas que faciliten la inversión
en Angola, que reduzcan los costes del envío y que aumenten
los servicios nacionales e internacionales de envío.

El informe, financiado por la OIM, ha sido elaborado en
colaboración con el Ministerio angoleño de Asuntos
Exteriores, mediante el Instituto de Apoyo a las Comunidades
Angoleñas en el Exterior, y gracias al apoyo de la ONG
Development Workshop.

Para más información, póngase en contacto
con:

Paola Álvarez

OIM Ginebra

Tel. +41 22 717 95 22

E-mail: "mailto:palvarez@iom.int">palvarez@iom.int