Comunicado
Global

Historias reales de refugiados rohingyas que han sido víctimas de trata son usadas por la OIM en Bangladesh para concientizar y luchar contra los riesgos de tal delito

Cox's Bazar – La OIM en su calidad de Organismo de las Naciones Unidas para la Migración ha lanzado una serie de nuevos libros con historietas que cuentan historias verídicas sobre los refugiados rohingyas que han sido víctimas de trata, con el fin de crear conciencia entre quienes son vulnerables a tal delito en la zona sur de Bangladesh.

A fines del mes de agosto de 2017 la violencia en Myanmar desató un éxodo que forzó a más de 700.000 refugiados rohingyas a dejar sus hogares en Myanmar para dirigirse a Bangladesh. La zona fronteriza de Cox’s Bazar en donde viven actualmente ya era el objetivo por parte de tratantes incluso desde mucho antes de que cientos de miles de refugiados llegaran en tan sólo un par de meses.

Sin tener acceso a oportunidades adecuadas para procurar su sustento en Myanmar o en Bangladesh, y con la mayor parte de la población en condición de apátridas debido a la extendida discriminación étnica en Myanmar por la cual se les niega el derecho a viajar de forma legítima a otros países, los refugiados rohingyas son extremadamente vulnerables a la explotación. La naturaleza clandestina del delito hace que sea imposible determinar con exactitud la cantidad precisa de refugiados rohingyas afectados de forma directa por la trata y un alto porcentaje del casi millón de refugiados constituyen blancos potenciales del delito, siéndolo también las comunidades que los albergan.

Mahira*, de ocho años de edad, fue incentivada por un vecino y por su familia en un campamento de refugiados rohingyas para que fuera a trabajar en el cuidado de un bebé en una ciudad cercana. Cuando llegó allí la niña se encontró alejada de su familia, trabajando desde muy temprano en la mañana hasta muy tarde en la noche y era brutalmente golpeada cada vez que el bebé lloraba.

Mariam*, una joven rohingya, pensó que la oportunidad de abandonar el campamento de refugiados en el cual vivía para trabajar como mucama de hotel en un centro turístico en la playa podría sacar a su familia de la pobreza. En lugar de eso, la engañaron y terminó en un burdel. La “amable tía” que le consiguió ese empleo la vendió para que trabajara en prostitución forzada.

Rashid*, un padre rohingya con dos niños pensó que dejaría el campamento de refugiados para realizar un buen trabajo en otro país. Pero luego, en tierra desconocida, fue aprisionado en un contenedor de almacenamiento y brutalmente golpeado mientras sostenía un teléfono en su oído, con el cual llamaría a su familia para chantajearlos a fin de que pagaran una suma para su rescate.

Estas tres historias de la vida real relacionadas con los refugiados rohingyas han sido adaptadas por la OIM en el formato de historietas para ayudar a enseñarles a los refugiados y a las comunidades de acogida en Cox’s Bazar acerca de los verdaderos peligros de la trata de personas.

Más de 76 víctimas de trata han recibido ahora asistencia directa de parte del equipo de protección de la OIM. No obstante, esto de ningún modo refleja la verdadera magnitud del problema en campo.

La gran mayoría de quienes caen en manos de los tratantes no regresan. Pero incluso si lograr retornar a sus casas con sus familias, para algunos sobrevivientes –en particular para aquellos que han sobrevivido a la industria del sexo – soportar la vergüenza y el estigma asociado con dicha experiencia significa que nunca podrán relatar lo que han vivido. Si bien las preocupaciones en torno a las mujeres y jóvenes refugiadas que han sido víctimas de trata para explotación sexual son un tema clave de estudio para los expertos de la OIM, los mismos dicen que la trata puede adoptar variadas formas.

“Como estas historias basadas en experiencias reales lo demuestran, la trata afecta a todos, no solamente a las mujeres y niños sino también a los hombres,” dice Dina Parmer, Jefa de Protección en la OIM Cox’s Bazar. “Las víctimas del delito pueden ser abordadas de muy diversas formas. Los tratantes a menudo utilizan los factores de vulnerabilidad para sacar ventajas de los mismos. Por ello es que es sumamente importante concientizar a los refugiados y a las comunidades de acogida en lo relativo a las diferentes formas de trata y el modo de identificar lo antes posible las diferentes situaciones que pueden ser potencialmente peligrosas,” agregó.

Como Organismo líder en materia de prevención del delito de trata en todo el mundo, la OIM y su equipo de protección tienen experiencia en combatir los riesgos que la trata implica en una gran variedad de entornos. No obstante ello, la rápida aparición de refugiados de Myanmar hacia Bangladesh han creado desafíos específicos en la materia. Debido al hecho de que el rohingya es un idioma que se apoya en la oralidad más que en el lenguaje escrito, fue necesaria una solución innovadora para poder ayudar a explicar los riesgos a una comunidad en la que los mensajes basados en textos no funcionaban.

“Las historietas son simples pero claras. Han sido diseñadas para ser usadas por los voluntarios que trabajan en el seno de la comunidad para poder explicar a los miembros de la comunidad los riesgos de la trata y cómo evitarlos, en un idioma que pueda ser comprendido por todos,” dijo Parmer.

Ha habido un lanzamiento inicial de 550 libros y unos 250 voluntarios comunitarios de la OIM y sus socios usarán los mismos para poder llegar a las comunidades y difundir información acerca de los riesgos que la trata de personas conlleva.

“Estas historietas son muy convincentes y fáciles de entender. Serán acompañadas por relatos orales tras los cuales habrá debates conducidos por los voluntarios en las comunidades. Las sesiones de tal modo serán mucho más atractivas; esperamos que puedan recibir el mensaje que queremos transmitir y que pueda mitigarse el riesgo de la trata,” dijo el capacitador Jishu Barua que pertenece a Young Power in Social Action (YPSA por su sigla en inglés), un socio de la OIM en la lucha contra la trata 

Para mayor información por favor contactar a la OIM en Cox’s Bazar, Fiona MacGregor, Tel: +8801733335221, o a Olivia Headon, Email: oheadon@iom.int