Comunicado
Global

Es importante no olvidar a los migrantes en las respuesta nacionales frente a la gripe A

Según la OIM, los gobiernos deben incluir a las comunidades
de migrantes en los planes de respuesta nacional si se quieren
obtener resultados positivos en los esfuerzos por frenar una
posible pandemia de Gripe A (H1N1).

Antes de tener evidencias de un brote, un gran número de
gobiernos han desarrollado planes de preparación para la
pandemia de la gripe, la cual.  Hasta la fecha, la
Organización Mundial de la Salud (OMS), ha confirmado la
existencia de 331 casos en 11 países.  Sin embargo, a
menudo se pasan por alto las necesidades de la población
migrante, situación que tiene que cambiar de manera urgente
si se quiere impedir una crisis a nivel mundial.

Los migrantes conforman un grupo muy variado de personas:
migrantes irregulares, demandantes de asilo, refugiados, y
desplazados internos, entre otros.  La exclusión social
y la marginalización de algunos de estos grupos por no estar
en situación legal y/o a causa de la pobreza, hace que el
acceso de esta población a la salud sea limitado o
inexistente.  En un momento en que la OMS ha elevado el nivel
de alerta a 5, indicando un riesgo de pandemia inminente, los
migrantes irregulares se encuentran entre la población
especialmente vulnerable.

"La rápida propagación del virus del H1N1
evidencia la crítica relación existente entre la
movilidad humana y la salud.  Debido a que los migrantes
representan un elevado número dentro de la población
nacional y a que la naturaleza contagiosa de la Gripe A no
distingue entre nacionales y no nacionales, es de interés
público que cada comunidad garantice el acceso a una
información clara, al tratamiento y a la atención
médica,” explica Jacqueline Weekers, Asesora sobre
políticas de salud y migración de la OIM.

"Igualmente, deberían realizarse esfuerzos para disipar
los temores de los migrantes irregulares que se enferman y que
piensan que si acuden a los servicios médicos serán
deportados o sufrirán algún tipo de
repercusión, " añade. "En una situación de
este tipo es necesario eliminar las barreras de acceso a la
sanidad".

La información sanitaria debe estar disponible
lingüísticamente y debe presentar formatos culturales
apropiados, especialmente entre los grupos de migrantes más
numerosos y en los lugares más pertinentes, como en los
centros comunitarios y lugares de culto, para que así puedan
llegar a los migrantes.  Asimismo, es necesario reforzar las
capacidades de y desde dentro de las comunidades de migrantes para
poder responder frente a una pandemia.

La OIM está completamente de acuerdo con la
declaración de la Directora General de la OMS, Margaret
Chan, en la que afirma que la comunidad internacional tiene que
tomar esta situación como una ventana a las oportunidades...
de solidaridad mundial en la búsqueda de respuestas y
soluciones que beneficien a todos los países y a toda la
humanidad ya que, después de todo, en el caso de una
pandemia, la humanidad al completo está bajo amenaza.

Por su parte, la OIM trabaja junto a los 125 Estados miembros,
organizaciones internacionales, ONG, sociedad civil y el sector
privado para identificar las necesidades de los migrantes frente a
una pandemia.