Viena — En una importante conferencia sobre el fenómeno de “fuga de cerebros” que tuvo lugar el lunes en la sede de la Organización para la Seguridad y la Cooperación en Europa (OSCE por su sigla en inglés), la Organización Internacional para las Migraciones (OIM) advirtió que los países de Europa central y del este están siendo testigos de cambios dramáticos en sus patrones migratorios, modificando la conformación de las comunidades y planteando desafíos inesperados.

La cambiante naturaleza del trabajo y las tendencias demográficas están teniendo un significativo impacto sobre las políticas en materia de migración laboral en la región, dijo Argentina Szabados, Directora Regional de la OIM para Europa del Sudeste, Europa del Este y Asia Central, al dirigirse a la concurrencia en el Palacio Hofburg en Viena.

“La rápida digitalización del trabajo y la denominada economía ‘gig’ o esporádica tienen influencias significativas y con frecuencia difíciles de predecir”, dijo Szabados. “Los actuales niveles de migración y las tendencias demográficas en la región sugieren que la movilidad laboral seguirá siendo una característica típica de la región. Esto es especialmente real en el caso de trabajos que no se pueden hacer en el exterior ni se pueden automatizar”.

La conferencia sirvió para que los representantes del gobierno, de las agencias de Naciones Unidas, organizaciones internacionales, y del mundo de los negocios evaluaran la evolución de los patrones migratorios del capital humano, de la revisión de los marcos conceptuales existentes y de la cooperación renovada. El diálogo de alto nivel también brindó la oportunidad de debatir nuevas ideas que pueden dar forma a futuras políticas, a la par que se presenta el nexo entre las fuerzas de trabajo y los negocios en el debate actual.

El evento fue organizado por la Iniciativa Cooperativa para Europa del Sudeste, bajo el patrocinio de Alexander van der Bellen, Presidente Federal de la República de Austria.

A la par que se ponderaron los esfuerzos realizados para insertar e integrar a los trabajadores migrantes en el cambiante mundo del trabajo, Szabados describió los desafíos que la sociedad enfrenta: “Es necesario que reconozcamos que la integración no tiene que ver solamente con los servicios que les ofrecemos a los inmigrantes, sino también con la forma en la que diseñamos nuestros espacios públicos, el modo en el que estructuramos nuestras políticas en materia de viviendas, la forma en que organizamos nuestro transporte público y el modo en el que los medios de comunicación informan”. Agregó que: “Los gobiernos que apoyan la movilidad laboral y los empleadores que traen a trabajadores extranjeros necesitan trabajar juntos con los actores claves a nivel local para desarrollar enfoques integrales que apoyen la integración de los migrantes y la cohesión social dentro de las comunidades”.

Para más información por favor contactar a Joe Lowry en la Oficina Regional de la OIM para  Europa del Sudeste, Europa del Este y Asia Central. Tel: +436603776404. Email jlowry@iom.int