-
Quiénes somos
Quiénes somosLa Organización Internacional para las Migraciones (OIM) forma parte del Sistema de las Naciones Unidas y es la organización intergubernamental líder que desde 1951 promueve una migración humana y ordenada para beneficio de todos, con 175 Estados Miembros y presencia en 171 países.
Sobre nosotros
Sobre nosotros
-
Nuestro trabajo
Nuestro trabajoComo organización intergubernamental líder que desde 1951 promueve una migración humana y ordenada, la OIM juega un rol clave apoyando el logro de la Agenda 2030 por medio de diferentes áreas de intervención que conectan la asistencia humanitaria con el desarrollo sostenible.
Qué hacemos
Qué hacemos
Partenariados
Partenariados
- Dónde operamos
-
Actúa
Actúa
Trabaje con nosotros
Trabaje con nosotros
Participe
Participe
- Datos e investigación
- 2030 AGENDA
En dos semanas, 270.000 personas han huido de Myanmar: la OIM aumenta su respuesta de emergencia en Bangladesh
Bangladesh – Hoy, (8/9) la OIM en su calidad de Organismo de las Naciones Unidas para la Migración, confirmó que desde el 25 de agosto hasta la fecha 270.000 personas han huido de la violencia imperante en Myanmar a la búsqueda de seguridad en Bangladesh.
La OIM, que en el día de ayer asignó 1 millón de dólares estadounidenses de sus fondos de emergencia con el fin de aumentar la respuesta humanitaria en Cox’s Bazar, se encuentra trabajando con el gobierno y con sus socios a fin de incrementar la provisión de asistencia vital a aquellos que más la necesitan. Entre las necesidades inmediatas que se han identificado se pueden mencionar los albergues, el agua potable, alimentos y la asistencia médica.
El Fondo Central de Respuesta a Emergencias de la ONU anunció también ayer que destinará una suma adicional de 7 millones de dólares para ayudar a los miles de indigentes que continúan llegando a Bangladesh.
“Llegué aquí hace tres días junto con mi marido y con cuatro hijos. Nos llevó seis días caminar hasta aquí, y teníamos muy poco para comer. No pude traer nada conmigo. Incluso la ropa que teníamos, la perdimos en el camino. Ahora necesitamos imperiosamente comida y albergue. Necesitamos elementos para poder cocinar y un lugar para poder lavar. No hemos logrado conseguir nada aún, excepto la comida de hoy,” sostuvo Najuma Begum al momento de conversar con el equipo de la OIM que se encontraba recopilando información sobre las necesidades en un centro de distribución de alimentos cercano al asentamiento temporario de Kutupalong.
Si bien la familia de Najuma logró conseguir comida lista en el centro de distribución de alimentos, muchas personas se han establecido en zonas que están demasiado lejos de los centros de apoyo y no pueden recibir ayuda. La mayor parte de las familias están viviendo al aire libre, bajo la lluvia, en tanto que especialmente los niños y los ancianos se encuentran en riesgo de contraer enfermedades.
La cifra de nuevas llegadas ha aumentado considerablemente en parte debido a la evaluación conjunta de necesidades realizada el 6 de septiembre, cuando los equipos inter-agencias visitaron más lugares en las comunidades receptoras. Las llegadas identificadas en entornos de comunidades receptoras que con anterioridad no habían sido visitadas dan cuenta de 75.000 en 9 lugares visitados. Al mismo tiempo, los números de llegadas en los lugares temporales previamente conocidos continúan también aumentando, y más de 10.000 se encuentran en la zona de la Municipalidad de Teknaf.
Cerca de 130.000 personas de entre los recién llegados están ahora viviendo en los campamentos de refugiados registrados y en tres asentamientos temporarios en Kutupalong, Leda y Balukhali. Otros 90.000 están siendo alojados en las comunidades receptoras, y cerca de 50.000 se han instalado en nuevos asentamientos espontáneos que se están expandiendo con rapidez con personas que siguen aún buscando espacio para instalar sus albergues temporarios.
La cuestión de la seguridad ha sido una preocupación importante para los recién llegados, especialmente las muchachas. “Tengo dos hijas jóvenes conmigo y temo por su seguridad. No tenemos letrinas y tenemos miedo de salir a la noche a los campos para poder hacer nuestras necesidades. Generalmente vamos en grupo si tenemos que hacerlo,” sostuvo Ajumar Begum, quien se encuentra alojada cerca del asentamiento temporal de Balukhali.
Las instalaciones destinadas al cuidado de la salud también se están esforzando para poder proveer servicios adecuados ya que el número de personas que necesitan de cuidados básicos de salud y de cuidados de emergencia continúa aumentando. Siete equipos sanitarios móviles han sido desplegados en las zonas de los asentamientos espontáneos, y la OIM y sus socios se encuentran reclutando más doctores, enfermeras y parteras para aumentar el alcance del accionar de sus equipos. La gente tiene demasiado miedo y está agotada como para poder viajar largas distancias y solicitar servicios de cuidado de la salud, de modo que es imperativo que tales cuidados se provean lo más cerca de los asentamientos en la medida de lo posible.
Entre los recién llegados hay mujeres embarazadas o que están amamantando.
Halima Khanam, embarazada de ocho meses y que se encuentra en Balukhali, está esperando su primer hijo. “He estado tres días con mi madre y con mi hermano menor. Tengo miedo, no tengo idea de dónde está mi marido. Dependemos de la familia con la cual estamos viviendo, no sé por cuánto tiempo más podremos sobrevivir,” le dijo a uno de los integrantes del equipo de la OIM. De acuerdo con información del Grupo de Coordinación entre Sectores (ISCG) que se encuentra en Cox’s Bazar, y que ha sido convocado por la OIM, el número de nuevos arribos continúa en aumento (http://cxbcoordination.org).
El miércoles 6/9 hubo un fuerte aumento en las llegadas ya que al menos 300 embarcaciones llegaron a Cox’s Bazar procedentes de Myanmar. Las rutas marítimas son especialmente peligrosas en esta época del año en la que las embarcaciones con frecuencia naufragan en los agitados mares.
Los recién llegados normalmente comienzan buscando espacio en los asentamientos temporarios ya establecidos, en donde se dispone de algunos servicios. Pero la capacidad de los mismos se encuentra ya colapsada. A raíz de ello, tres nuevos asentamientos espontáneos se han creado rápidamente en zonas que aún disponen de muy pocos servicios.
“Las agencias humanitarias están desplegando equipos médicos móviles, instalando letrinas de emergencia, proveyendo agua y distribuyendo lonas para albergues básicos, así como también raciones de alimentos a los recién llegados. Pero se necesita mucho más y con mucha rapidez nos estamos quedando sin stock,” sostuvo Margo Baars, coordinadora de ISCG.
A la fecha, la OIM ha hecho entrega a los recién llegados de 6.957 lonas plásticas (con 3.479 kg. de soga), 300 colchonetas para dormir, y 600 kits de artículos no alimentarios con elementos esenciales tales como equipos para cocinar, ropa, artículos de cama y redes contra los mosquitos.
Antes del último influjo, la OIM Bangladesh se encontraba coordinando asistencia humanitaria a cerca de 200.000 nacionales de Myanmar indocumentados que estaban viviendo en asentamientos temporarios en Cox’s Bazar.
Los servicios vitales que han sido suministrados por la OIM y por sus agencias asociadas incluyen la provisión de agua potable y servicios sanitarios, albergue, seguridad alimentaria, cuidado de la salud, educación, y apoyo psicosocial destinado a los individuos más vulnerables muchos de los cuales padecen trauma mental severo o han sobrevivido a violencia sexual.
La mayor parte de las personas que ahora están cruzando la frontera son mujeres, niños y ancianos. Muchos de ellos están en estado de vulnerabilidad y no pueden valerse por sí mismos.
Para mayor información por favor contactar a Peppi Siddiq en la OIM Bangladesh. Email: pksiddiq@iom.int, Tel. +8801755568894.