Comunicado
Global

El gobierno fomenta el regreso a medida que los desplazamientos disminuyen

Según el último Informe de Evaluación sobre
Desplazamientos y Retornos, publicado esta semana por la OIM, el
gobierno iraquí está poniendo mayor énfasis en
el regreso de los desplazados internos y de los refugiados a
través de una serie de medidas jurídicas y
prácticas, entre las que se incluyen la asignación de
250 mil millones de IQD (US$ 213 millones) para correr con los
gastos del retorno.

La Orden 101 del Primer Ministro Nouri al-Maliki, que
entró en vigor el 1 de septiembre, exige la
evacuación de todas las viviendas ocupadas ilegalmente en
Bagdad o la condena de los ocupantes ilegales.  Todos aquellos
que acepten el desalojo recibirán una compensación
económica de 300.000 IQD (US$255) mensuales durante seis
meses, cuyo objetivo es el de ayudarles a encontrar opciones de
viviendas alternativas.

Asimismo, la Orden establece centros de ayuda al regreso en
Bagdad y prevé la expansión del sistema por todo el
país.  Dichos centros ayudarán a los retornados
a registrarse, a recibir un subsidio de 1 millón de IQD
(US$852) y a resolver todos aquellos temas relacionados con la
propiedad que puedan encontrase una vez que hayan regresado.

A fecha de 21 de septiembre y según la información
disponible a través del registro de retornados del
Ministerio de Desplazados y Migración (MoDM, por sus siglas
en inglés), de la OIM y de las visitas de campo realizadas
por monitores del MoDM, de evaluaciones rápidas del ACNUR y
otras fuentes, el número de familias que han regresado a
Bagdad se eleva a 16.782, lo cual suma un total de 100.692
personas.

En el resto del país se han identificado otras 11.986
familias repatriadas, 8.691 de las cuales se encuentran en las
provincias de Anbar y Diyala.  A escala nacional, el 92% de
las personas que regresan son desplazados internos.

A pesar de que la seguridad está mejorando en muchas
partes del país y de la disminución del número
de desplazamientos, el informe señala que bastantes
desplazados internos siguen sin tener la posibilidad de regresar a
sus hogares o no están dispuestos a ello y necesitan ayuda
humanitaria básica, tal y como víveres y otros
productos no alimentarios.

Muchos siguen enfrentándose a la amenaza del
desahucio.  En el distrito de Rusafa, en Bagdad, se ha avisado
a más de 500 familias desplazadas de la obligación de
desalojar sus viviendas.  Según se informa, otros
grupos de familias desplazadas se enfrentan al mismo problema en
las provincias de Babilonia, Basra, Kirkuk, Missan y Qadissiya.

Según el informe, la sequía es una gran
preocupación tanto para los desplazados como para las
comunidades de acogida, e incluso ha llegado a ser la causa de
nuevos desplazamientos, por ejemplo, en Anbar, donde las familias
que viven del pastoreo se han visto obligadas a mudarse en busca de
mejores condiciones.

El número estimado de desplazados internos desde el
bombardeo de la mezquita de Samarra Al-Askari en febrero de 2006 se
sitúa alrededor de 1.596.448 personas.  Esta cifra,
sumada a 1.212.108 personas que se calculan son desplazados
internos desde antes de febrero de 2006, supone un total de 2.8
millones de personas que en la actualidad son desplazados dentro
del país.

Los informes sobre los repatriados, junto a los informes
regulares de la OIM sobre desplazamientos, en los que se incluyen
los perfiles de las provincias, las actualizaciones bisemanales,
actualizaciones sobre los campamentos y las reseñas anuales
y semestrales, se encuentran disponibles en "paragraph-link-no-underline" href=
"http://www.iom-iraq.net/library.html#IDP">http://www.iom-iraq.net/library.html#IDP