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Quiénes somosLa Organización Internacional para las Migraciones (OIM) forma parte del Sistema de las Naciones Unidas y es la organización intergubernamental líder que desde 1951 promueve una migración humana y ordenada para beneficio de todos, con 175 Estados Miembros y presencia en 171 países.
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Nuestro trabajoComo organización intergubernamental líder que desde 1951 promueve una migración humana y ordenada, la OIM juega un rol clave apoyando el logro de la Agenda 2030 por medio de diferentes áreas de intervención que conectan la asistencia humanitaria con el desarrollo sostenible.
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Concienciar sobre los peligros que conllevan la trata de personas y la migración irregular
Por Danilo Valladares, Oficina de la OIM en Guatemala; correo electrónico: dvalladares@iom.int
“No sabía que tenía que pagar 20.000 dólares EE.UU. para llegar a los Estados Unidos. Esto no entraba en mis planes. ¿Cómo voy a reembolsar semejante suma y dar de comer a mi familia en mi país?”. Con estas palabras se dirigía, conmocionada, una mujer indígena víctima de la trata a su traficante —el propietario de una explotación agrícola estadounidense que había pagado a una red de delincuentes para que la trajera desde su aldea en Guatemala con el fin de someterla a explotación laboral en su empresa agrícola para el cultivo de fresas.
Felizmente, la mujer indígena y el propietario de la explotación agrícola eran dos personajes de un ejercicio de juego de roles durante un reciente taller de la OIM centrado en la prevención de la trata de personas y de la migración irregular, y financiado por la Agencia de los Estados Unidos para el Desarrollo Internacional (USAID).
Unos 125 alcaldes comunitarios y otras autoridades locales recorrieron varios kilómetros a pie con el fin de participar en dicho taller, celebrado en una cálida mañana en el pueblo indígena Mam de Comitancillo, en el Oeste de Guatemala.
Ramiro Coronado, alcalde municipal de Comitancillo y participante en el taller, se dirigió a la multitud declarando: “Esta formación es muy importante para nosotros, porque permite que los alcaldes y concejos de desarrollo comunitario sepan lo que puede suceder a los migrantes que parten rumbo a los Estados Unidos.”
De camino a México y a los Estados Unidos de América, los migrantes guatemaltecos y centroamericanos suelen ser víctimas de secuestros, de extorsión, de asaltos y de la trata de personas. A pesar de ello, cada día viajan al norte miles de personas, muchas de ellas provenientes de aldeas fronterizas.
El departamento de San Marcos, situado en la frontera con México, es uno de los que registra mayores flujos migratorios. También es el departamento que recibe el 11% de las remesas totales del país. Sólo el departamento de Guatemala, donde está ubicada la capital, recibe más del 18%.
Coronado puso énfasis en la importancia que reviste el evento organizado tras el terremoto del pasado mes de noviembre, que ha incitado a los residentes de San Marcos a emigrar a México y a los Estados Unidos de América en busca de empleo con el fin de reconstruir sus viviendas, destruidas o dañadas por el terremoto.
El taller forma parte de una serie de eventos de concienciación organizados en el departamento de San Marcos sobre los riesgos que comportan la trata de personas y la migración irregular.
Philip Burns, Asistente de Proyectos de la OIM en San Marcos, señaló: “La OIM, junto con las autoridades de 8 municipios y de 499 comunidades del departamento de San Marcos, ha llevado a cabo talleres sobre los peligros que conllevan la trata de personas y la migración irregular”.
San Marcos también es un importante lugar de tránsito para cientos de centroamericanos que atraviesan cada día la permeable frontera que une Guatemala con el estado mexicano de Chiapas.
Burns añadió: “Nuestro objetivo es informar a la población de alto riesgo de los peligros que entraña la migración irregular, en particular el peligro que conlleva la trata de personas, a la cual son particularmente vulnerables los pueblos indígenas, las personas con bajos niveles de educación, los niños y las mujeres”.
Los participantes han comunicado a la OIM lo mucho que han aprendido en estas sesiones sobre temas que no se tratan con frecuencia en estas comunidades remotas.
De hecho, Delfino Pérez, alcalde comunitario y participante en este reciente taller, admitió que era la primera vez que oía hablar de la trata de personas. Declaró: “Esto es muy importante, porque los migrantes siempre topan con asaltantes durante el viaje, y algunas veces sufren accidentes”.
Pérez añadió: “Guatemala es un país sumamente pobre, por lo que las personas se ven obligadas a buscar oportunidades en los Estados Unidos para mejorar sus condiciones de vida”.
Burns destacó: “Las autoridades locales y los dirigentes comunitarios tienen un papel fundamental que desempeñar en la prevención de la trata de personas y en la lucha contra la misma, por tanto, es esencial que la OIM siga concienciando sobre estas cuestiones”.
Éstas no son las únicas actividades que la OIM está realizando en este departamento occidental. La Organización ha desplegado esfuerzos para reintegrar a 239 niños y adolescentes migrantes vulnerables en el municipio de Concepción Tutuapa.
Los niños y adolescentes corren un mayor riesgo de ser víctimas de la trata, de la explotación sexual y de la explotación laboral como trabajadores agrícolas o vendedores ambulantes en la ciudad de Tapachula (México) y en las zonas aledañas.
En el periodo comprendido entre 2010 y 2011, la OIM proporcionó becas y 63 proyectos productivos a 139 menores cuyas edades oscilaban entre los 10 y los 17 años.
Walter Arreaga, en la Oficina de la OIM en Guatemala, declaró: “El 60% comprendía menores que habían emigrado más de dos veces a Tapachula y otras ciudades de México, y el 40% restante corría el riesgo de emigrar porque sus hermanos ya se habían marchado.”
A los menores participantes se les proporcionó gallinas, cerdos y ovejas para ayudarles a sustentar a sus familias, así como semillas para plantar papas, rábanos y otras verduras para el consumo propio. Además, recibieron apoyo psicosocial y se les sensibilizó sobre los riesgos que entrañan la migración irregular y la trata de personas.
Arreaga añadió: “Realizamos un seguimiento de los progresos educativos de los menores con ayuda de dos docentes, y el 100% aprobó su curso. También logramos que los padres y las autoridades locales participaran en las actividades de concienciación sobre los riesgos de la migración y de la trata de personas. Como consecuencia, el 95% de los menores a quienes prestamos asistencia no ha vuelto a emigrar”.
En 2012, otros 100 menores se beneficiaron del proyecto de la OIM y obtuvieron los mismos resultados, además, el pasado mes de octubre la OIM amplió el proyecto para incluir becas destinadas a menores en Tacana y Tajumulco, otros dos municipios que registran altos niveles de emigración infantil.