Migrant Stories

Bajo el puente

“Me cuesta creer
que no hay nadie afuera.
Me cuesta creer
que estoy solo.”

Esta letra es de la canción Under the bridge (“Bajo el puente”), del grupo Red Hot Chili Peppers. También podría aplicarse a Doy Sen, que vive, literalmente, bajo un puente situado en la aldea de Pang Mu, a pocos kilómetros de distancia de Mae Hong Son, al norte de Tailandia.

Doy Sen es un joven de 24 años de edad, cuya mirada denota confusión. Hace diez años abandonó su ciudad natal de Tuanggoo (Myanmar) a causa del conflicto que estalló en la misma. Afirma: “No provengo de una familia pobre”.  Sin embargo, en la actualidad, su situación no puede ser más precaria.

Hace tres años, se “asentó” bajo el puente situado en la autopista 1095, donde vive en un mosquitero, con su ropa colgada de una cuerda, y con sus cazuelas y platos como únicas pertenencias reales. Sus vecinos más cercanos son dos bueyes.  

Doy Sen comenta: “Hay una corriente cercana que borbotea y que, como pueden ver, se convierte en un torrente durante la temporada de lluvias. Sin embargo, la tierra se mantiene seca bajo el puente. Hay peores lugares que este.”

En tiempos mejores, Doy Sen podía ganar 120 bahts tailandeses (4 dólares EE.UU.) al día en los arrozales, pero ese trabajo era irregular, y más aún desde que contrajo tuberculosis el año pasado. Cada día recibe medicamentos de la clínica local financiada por la OIM, y en breve estará oficialmente curado de la enfermedad.   

Aunque se preocupa por su madre anciana, Doy Sen no va a ninguna parte por el momento. Como reza la canción: “Bajo el puente. Aquí me quedaré”.